DALLAS, Texas.- El niño Brayden Crandall aplicó la maniobra de ‘Detenerse, caer y girar’ para evitar que su cuerpo se viera severamente consumido por las llamas en su casa.
‘Detenerse, caer y girar’: la maniobra que salvó a un niño de peores quemaduras
Brayden Crandall, de ahora 11 años, siguió la maniobra ‘Detenerse, caer y girar’ que lo salvó de que las llamas invadieran más su cuerpo en un incidente hace dos años. En esta temporada de verano, parrilladas y vacaciones de niños, Brayden recuerda cómo logró salvarse y pide a los niños no jugar con fuego.
Por:Univision
Brayden Crandall contó que siguió la maniobra ‘Detenerse, caer y girar’ que aprendió en la escuela y esto evitó que las llamas consumieran más su cuerpo.
Imagen Hospital Parkland
El pasado 18 de abril del 2020, Brayden Crandall, de entonces 9 años, estaba afuera de su casa viendo como su papá quemaba montos de hormigas de fuego.
Un descuido causó una fuerte explosión y la ropa de Brayden ardió en llamas.
El pequeño recordó que en la escuela le habían explicado que en caso de incendiarse había que detenerse, caer y girar hasta que se apague.
“Si en la ropa se prende fuego, debes detenerte, caer y girar. Es lo que hice”, recordó.
Eso logró detener el fuego, pero aún así, el pequeño sufrió quemaduras en más del 50% de su cuerpo.
Brayden fue hospitalizado por 53 días en la unidad de cuidados intensivos para quemados del hospital Parkland.
Él tenía quemaduras en su abdomen, rostro, ambas piernas, espalda y brazos.
Según funcionarios del hospital, el niño se mantuvo positivo e incluso decía que la cosa más importante para lograr su recuperación era “ponerles atención a los doctores.”
El centro de quemaduras del hospital Parkland es el único centro para adultos y pacientes pediátricos en el norte de Texas que es verificado por la Asociación Americana de Quemaduras.
Ahí el pequeño Brayden recibió 5 cirugías de injerto de piel, tratamiento láser y terapias físicas. Ahora Brayden urge sobre la importancia de tener precaución al ver un incendio.
Él recomienda que los niños se alejen del fuego, encuentren un adulto si ven un incendio, llamar al 911, y si resultan heridos, mantener la calma y al estar en el hospital, obedecer a los médicos.
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