Leslie Adindu, el inmigrante desamparado que firmó beca para jugar futbol americano... sin jugar

Leslie Adindu trabajaba de 3 a 7 am para mantener un lugar en su albergue y sin una formación completa en el futbol americano, pero sí con esfuerzo y talento, firmó una beca deportiva universitaria pese a no poder jugar oficialmente en preparatoria, pero con el apoyo de sus entrenadores de Arlington Heights, en Fort Worth.

Adindu, de 19 años, se vio desamparado y forzado a vivir en un albergue tras una disputa familiar que terminó en el traslado de su padre a Nueva Orleans, Luisiana, tras llegar desde Nigeria a Texas en el otoño de 2019, según relata el portal texasfootball.com.

Al joven le interesaba primero jugar futbol soccer, pero fue el coach de línea defensiva de los Yellowjackets, Charles Perry, quien vio potencial para el futbol americano en Adindu, quien mide 6’3” (1.90 m.) y pesa 190 libras (86.2 kg.)

"No sabía cómo ponerse las almohadillas", dijo el entrenador en jefe de Arlington Heights, Phil Young. “No conocía las reglas del juego, era una pizarra limpia".

Todo eso ocurrió antes de la pandemia. Tras desatarse el covid-19, Young reveló que Leslie Adindu desapareció, no se le encontró a través de su teléfono y no era visto por nadie. Llegaron a pensar que regresó a Nigeria, donde permaneció su madre.

Ganar sin jugar

Pero en el primer día de prácticas, en septiembre pasado, reapareció, con 285 libras (129 kg.), casi irreconocible para los entrenadores, que se enteraron en ese momento de los sucesos que lo llevaron a quedarse sin hogar.

Leslie Adindu tuvo que adaptarse a trabajar de madrugada, asistir a la escuela y practicar deporte, pero hubo otro inconveniente: su edad. Para septiembre, estaba a punto de rebasar el límite permitido para jugar en preparatoria.

Los entrenadores de los Yellowjackets se las ingeniaron para ayudarlo, no para jugar con ellos, sino para que consiguiera una beca escolar, así que grabaron videos de sus prácticas y lo mandaron a varias universidades en todo el país.

Adindu se entrenó con el mismo ímpetu que sus compañeros, aunque él no podía jugar. La Universidad Southwest Baptist, en Missouri, se interesó en él y acordó con ellos en el Día Nacional de Firmas, este miércoles.

A Leslie Adindu, el esfuerzo le valió una nueva oportunidad para su futuro.

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