DALLAS, Texas - Finalmente, tras dos largos periodos de ausencia en los dos últimos años, especulaciones, rumores y peticiones de que dejara el puesto, Susan Hawk renunció esta tarde a su cargosde Fiscal de Distrito.
Fiscal del Distrito Dallas finalmente renunció
Susan Hawk envió una carta al Gobernador de Texas, en donde indica que necesita atender su salud, y no podía cumplir con sus tareas. Aunque nunca menciona la depresión, la mayoría en Dallas sabe que dos veces estuvo en una clínica para atenderse esta enfermedad.


Mediante una carta dirigida al Gobernandor de Texas, Hawk destacó que era muy difícil para ella tener que atender su salud y su trabajo.
"Aprecio la gracia que han demostrado y que yo he tratado de equilibrar mi salud y mis obligaciones. Este ha sido un proceso muy difícil para mí, ya que he dedicado mi vida a servir a nuestro sistema de justicia criminal. Mientras que mis problemas personales de salud han recibido mucha atención en los últimos meses, es mi esperanza de que esas cuestiones no hagan sombra a la gran obra de nuestra oficina en los últimos 20 meses", escribió Susan Hawk.
Ahora, será el Gobernador Gregg Abbott quien designe a un sucesor que lidere el puesto hasta noviembre cuando sean las elecciones.
La polémica en torno a su destitución empezó desde principios del 2015, recién cuando inició su gestión como Fiscal de Distrito.
De pronto, Susan Hawk se desapareció sin decir nada. Sus colaboradores dijeron que se había ido de vacaciones, pero pasaron días y días sin saberse nada. Hasta que regresó.
Entonces empezaron a filtrar la información de que estaba enferma de depresión y que había estado en una clínica para recuperarse. Al regresar, empezaron los cuestionamientos y a ventilarse cosas de su pasado como el consumo de drogas, y eso enfureció a sus colaboradores que la defendieron a toda costa.
Pero varios abogados de renombre en Dallas empezaron a pedir que renunciara, entre ellos Marcos Haney, uno de los dos abogados que presentaron una petición para obligar a Susan Hawk a renunciar o que fuera removida de su cargo en octubre de 2015.
"Siento que la señora Hawk es incapaz de servir a cabo su mandato como fiscal de distrito de Dallas", dijo Haney en su declaración. "Creo que es preocupante que se ha tardado tanto en reconocer que ella no era apto para el cargo. Creo que hizo un mal servicio a los ciudadanos del condado cuando corría para el cargo sabiendo que ella estaba sufriendo de una enfermedad mental aguda. fue nuestro conocimiento de su condición y de su incapacidad para llevar a cabo que llevó a nuestros esfuerzos para tenerla removido de su cargo el año pasado ".
Y es que Susan Hawk tenía un salario anual de $217,000 dólares anuales. Y precisamente se ventilaba en redes sociales que cómo era posible que ella ganara tanto dinero sin hacer nada. Si se la pasaba en la clínica de rehabilitación.
Los rumores sobre ella circularon en todas las oficinas y fue creciendo entre empleados, jueces y abogados, que estaban atentos a que en repetidas ocasiones, Susan Hawk no llegaba a los eventos programados o cancelaba en el último minuto.
A finales de julio del 2015, Susan Hawk iba a una reunión de fiscales de distrito en San Antonio. Ella llamó esa mañana y dijo que estaba enferma y no podía hacer más. Ella también canceló una reciente aparición como orador principal en un evento en beneficio de un grupo de sobrevivientes de agresión sexual.
"No parece ser un descanso de verano planeado porque ha cancelado todas sus citas desde hace mucho tiempo. Creo que están preocupados por su salud y estabilidad mental, sobre la base de los problemas que han surgido con los que han trabajado con ella", dijo John Cruezot, exJuez Federal.
Tras una ausencia de casi nueve semanas, la exfiscal de Distrito Dallas regresó a trabajar en Octubre del 2015, y reconoció por primera vez sus problemas emocionales y con drogas. Pero que estaba luchando por vencerlos.
Cindy Stormer, una exfuncionaria de la oficina de Susan Hawk presentó una demanda contra ella, y dijo que era una amenaza para el Condado Dallas, por su adicción a las drogas, depresión y actuaciones paranoicas. Pero el Juez David Peeples desestimó los cargos y respaldó a la Fiscal de Dallas.