DALLAS, Texas. Sofia Rueda tiene 76 años, llegó a la ciudad de Dallas desde Durango, México, hace más de 20 años, los últimos 15 los ha dedicado a practicar zumba en compañía de su hija Aurelia.
Doña Sofy es una mexicana de 76 años que inspira y motiva a los más jóvenes con sus pasos de zumba al norte de Texas
Sofia Rueda viene de Durango en México, a pesar de su edad cada día se despierta y va a bailar, lo hace para que los más jóvenes dejen sus teléfonos a un lado y busquen una vida más activa.

“Doña Sofy”, como es conocida por su familia y amigos, asiste cada día, de lunes a viernes a las 9 de la mañana, a sus prácticas sin falta.
“Cuando yo estoy preparando a mi niña para ir a la escuela, mi mamá ya está en el carro sentada, y dice vámonos, y pues vámonos”, nos comenta la hija de Doña Sofy, Aurelia, entre risas.
"Me decía no mija, porque no sé bailar": Hija de Doña Sofy
“Al principio me decía no mija, porque no sé bailar, yo nunca he bailado”, agrega Aurelia, que buscaba que su mamá tuviera una vida activa.
“Ella salía a caminar para hacer ejercicios, pero a mí me parecía muy peligroso”, comenta.
Así, Aurelia y Doña Sofy encontraron la zumba como una alternativa y desde entonces nunca faltan.
La zumba las unió como madre e hija
La zumba, que es una actividad con movimientos aeróbicos al ritmo de música latina, como salsa, merengue y hasta reguetón, las unió como madre e hija.
“Me gusta hacer ejercicios por mi salud, física y mental”, comenta Doña Sofy que se levanta cada día a las 7 de la mañana.
“Si Dios me presta vida y que yo esté bien, yo sigo hasta donde pueda, yo no pienso dejar de hacer zumba”, agrega la mexicana de 76 años.
Sofía Rueda busca inspirar y motivar a otros con su actitud
Doña Sofy revela que busca inspirar y motivar a todos, para que no se enfoquen en los teléfonos celulares y tengan una vida “con más movimiento”.
“ Hagan ejercicios porque es lo más sano, le quita a las personas varias enfermedades, con el ejercicio se motiva uno”, comenta mientras sonríe orgullosa de sus pasos de baile.
En ese momento de la entrevista empezó a sonar la música, Sofía Rueda se despidió de nosotros y junto a su hija empezó a bailar.
Cuando tengas pereza y te quieras quedar en la cama viendo tu teléfono, recuerda que en alguna parte de Dallas está Doña Sofy bailando con 76 años, cada día, todos los días.







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