Miguel Carrasquillo, puertorriqueño de 35 años, quiere aprovechar lo último que le queda de vida para pedir a legisladores que le dejen morir con dignidad.
Un hispano enfermo terminal pide a legisladores aprobar ley de muerte digna
Miguel Carrasquillo, puertorriqueño residente de Chicago de 35 años y que tiene un tumor cerebral, pide en un video en español a los legisladores de EEUU que aprueben leyes de asistencia médica para morir.

“Le pido a Dios que esto acabe ya, no es que yo quiera darme por vencido, pero estoy cansado de vivir como estoy viviendo”, dice Carrasquillo, quien hasta hace poco se desempeñaba como chef en Chicago, y quien fue diagnosticado con un tumor cerebral mortal en 2012. A pesar de los tratamientos, el cáncer se ha expandido por todo su cuerpo.
“Dolores de cabeza, dolores de espalda, convulsiones, choques eléctricos”, cuenta en un video divulgado este martes por la asociación Compassion & Choices para promover el Día Nacional de Decisiones en el Cuidado de la Salud que se celebrará este sábado 16 de abril.
Es la primera vez en más de 30 años que esta asociación sin fines de lucro, que educa a la población con enfermedades terminales sobre los requisitos que permiten la ayuda médica para morir, lanza una iniciativa en español .
“Ya era hora. Se trata de un tema que afecta a mucha gente, no distingue raza, color o grupo étnico, tenemos que abrir la conversación”, dijo Patricia A. González-Portillo, mánager de comunicaciones para hispanos en todo el país de la organización.
En el video, que se difundió tanto en inglés como en español, Carrasquillo pide a los legisladores a nivel nacional aprobar leyes que permitan a los adultos con enfermedades terminales la opción de recibir ayuda médica para dejar de vivir. La ayuda proporcionaría a este tipo de enfermos la opción de solicitar a su doctor un medicamento para morir pacíficamente en su sueño si ya no pueden más con el sufrimiento.
Por desgracia, para Miguel, quien también sufre de ceguera paulatina, la asistencia médica para morir no es una opción legalmente autorizada en Illinois o en Puerto Rico, donde tiene previsto pasar sus últimos días junto a sus padres.
Actualmente, sólo cinco estados autorizan la ayuda médica para morir: Oregon, Washington, Montana, Vermont, y California, donde la nueva ley entrará el efecto el 9 de junio.
"La trágica experiencia de Miguel ilustra claramente la necesidad urgente de crear opciones al final de la vida en todas las comunidades de nuestro país", dijo en un comunicado Barbara Lee, presidenta de Compassion & Choices, una abogada que coescribió la ley de Oregon.
Con el tiempo contado
De acuerdo con González, en abril pasado, a Miguel le habían dicho que sólo le quedaba un año de vida, plazo que ya se ha cumplido. Carrasquillo espera ahora que su historia ayude a persuadir a los legisladores de Estados Unidos y que autoricen la ayuda médica para morir como una opción al final de la vida.
"Senadores, yo les pido que de favor escuchen mi petición, que es morir con una dosis de pastillas, como Brittany Maynard que lo hizo en Oregón", señala Miguel en el video. "Ya estamos cansados de seguir luchando día tras día. Solamente escuchen, escuchen".
Miguel ha soportado con valentía los tratamientos para tratar de curar el tumor cerebral que lo invade y, por el momento, aminora sus dolores de cabeza a través de una bolsa de morfina conectada a su nervio ciático. Debido a que los dolores son cada vez más fuertes e insoportables, ha pedido que le suban las dosis.
"La persona que está sufriendo soy yo. Hay que estar en esos zapatos para que tú sientas lo que yo estoy sintiendo", relata Carrasquillo. “Ya he cumplido la cosa que ya quería hacer. Ya conocí a mi sobrino. Se llama Miguel Andrés. Ya yo estoy listo para morir".
La familia de Miguel lo apoya totalmente en su decisión. Nilsa Centeno, su madre, no se imagina el perder a su hijo mayor, quien además es su único hijo varón, pero para ella es aún más triste verlo morir lentamente con dolores insoportables.
"Lo he visto sufrir, lo he visto llorar, lo he visto caerse, desplomarse", dice Centeno en el video. "Se trata de la dignidad del ser humano y en este caso es mi hijo. Y esa dignidad hay que respetarla hasta el último momento".
Para González, Miguel desea que su experiencia también ayude a romper barreras y que los latinos hagan a un lado el tabú de no hablar sobre el tema de la muerte y la ayuda médica para morir.
"Los hispanos decimos que celebramos la muerte, pero cuando se trata de hablar de ella nos echamos para atrás, es necesario que de la misma manera que hablamos de los nacimientos se abra la conversación sobre la ayuda para morir y tener una muerte con dignidad. Es doloroso ver sufrir a un ser humano y no poder hacer nada para calmar ese dolor”, dijo González.









