Los residentes de Chicago podrán denunciar de manera anónima la mala conducta de sargentos, tenientes y capitanes gracias a la decisión este viernes de un árbitro independiente que avaló una serie de reformas al contrato de la ciudad con su sindicato de policía.
Chicago avala la denuncia anónima de la mala conducta de los oficiales de policía
Un árbitro independiente ordenó realizar una serie de reformas al contrato de la ciudad de Chicago con su sindicato de policía. Los cambios incluyen eliminar la declaración jurada al hacer una denuncia y terminar con la práctica de destruir los registros disciplinarios luego de cinco años.


El documento de 106 páginas del árbitro George Roumell Jr. establece que los términos para el próximo contrato con las tres unidades de la Asociación de Protección y Benevolencia de los Policías (PBPA, por sus siglas en inglés) permitirá que las quejas anónimas contra los oficiales sean investigadas por primera vez en 40 años.
Los cambios en el contrato también evitarán que los nombres de los denunciantes no se divulguen a los oficiales hasta después de que sean entrevistados, lo cual sucede al final de la investigación.
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Otra de las reformas terminará con la práctica de destruir los registros disciplinarios luego de cinco años, una medida que también la Corte Suprema de Illinois ordenó que se acabara en un dictamen emitido este mes.
"La histórica victoria de hoy representa años de esfuerzos para garantizar que nuestros contratos sindicales con la policía de Chicago representen los valores de nuestros oficiales y los residentes a los que sirven", dijo la alcaldesa Lori Lightfoot en un comunicado.
“Continuaremos luchando por estas mismas reformas, así como por otras medidas en nuestras negociaciones en curso con la FOP (las siglas en inglés de la Orden Fraternal de la Policía)”, añadió.
Lightfoot destacó que los contratos con los sindicales de la policía han sido un obstáculo importante para hacer los cambios necesarios en el Departamento de Policía de Chicago.
La decisión podría sentar un precedente para el contrato en negociación con FOP que representa la mayor parte de la fuerza de 13,500 oficiales de la ciudad.
El FOP se había manifestado en contra de la reforma al contrato, especialmente con la eliminación de la declaración jurada que deben presentar quienes denuncian a un oficial.
El presidente del sindicato, John Catanzara, había advertido a la alcaldesa el miércoles que la organización avalaría las huelgas si permitía las denuncias anónimas.
“Si quieren deshacerse de la declaración jurada, entonces eliminen el requisito de residencia del contrato y también quiten la cláusula de no huelga de nuestro contrato y luego, veamos cuán serio es realmente”, dijo Catanzara al diario Sun-Times.
El cambio en el contrato de la ciudad de Chicago con el sindicato de policías se da luego de semanas de protestas en el país por la muerte de George Floyd, un afroamericano que murió bajo la rodilla de un policía blanco en Minneapolis.






