AUSTIN, Texas. - La ejecución de Melissa Lucio, madre hispana de 14 hijos, sigue programada el 27 de abril de 2022 y, esta semana, la Conferencia Católica de Obispos de Texas pidió clemencia para ella.
Melissa Lucio: Obispos católicos de Texas piden parar ejecución de la madre de 14 hijos
El grupo de religiosos pidió que se frenara la ejecución de Melissa Lucio que está programado para el próximo 27 de abril. “Su corazón está centrado en Cristo”, lee el comunicado de la Conferencia Católica de Obispos de Texas.

Esta petición por parte del grupo católico, de frenar la ejecución de la hispana y darle la oportunidad de un nuevo juicio, se suma a las de organizaciones como Innocence Project, The Action Network y la Organización Interamericana de Derechos Humanos.
Lucio, de 54 años, es la primera hispana condenada a la pena de muerte en el estado de Texas. Su ejecución está programada para el próximo 27 de abril en la prisión de Huntsville, al norte de Houston. La mujer fue condenada por la muerte de su hija de 2 años en 2007.
“Melissa emprendió un viaje espiritual mientras estaba en prisión…su corazón está centrado en Cristo”, lee el comunicado de prensa.
La Conferencia Católica de Obispos de Texas indicó que Lucio fue “sentenciada a muerte por un proceso viciado”.
El caso de Melissa Lucio y por qué está condenada a muerte
Melissa Lucio y Robert Álvarez, su pareja, llamaron al número de emergencia 9-1-1 el 17 de febrero de 2007 porque Mariah Álvarez, su hija de 2 años, había caído por las escaleras. De acuerdo con autoridades, la niña estaba inconsciente y tenía moretones y un brazo roto. A Lucio le radicaron cargos por el asesinato de la niña y fue condenada a pena de muerte. Álvarez, por su lado, se le halló culpable de causar lesiones a un menor y fue condenado a solo cuatro años de cárcel.
“Sin pruebas ni testigos, fue condenada sobre la base de una admisión de culpabilidad pasiva y forzada, dada después de un riguroso interrogatorio la noche en que su hija de dos años, Mariah, murió después de una caída por una escalera”, lee el comunicado de la Conferencia Católica de Obispos de Texas.
Sandra Babcock, la representante de Lucio, dijo que la mujer se expresó que imaginaba que era la responsable de la muerte de su hija cuando fue interrogada. De acuerdo con la representante, la madre hispana era una persona que entendía debía seguir las órdenes de las autoridades y personas en poder.
“Una tragedia no se mejora de alguna manera matando a otra persona. La justicia no se restablece de repente porque muere otra persona. Ejecutar a Melissa no traerá paz a sus hijos sobrevivientes, solo traerá más dolor y sufrimiento…Es un proceso profundamente defectuoso, plagado de errores humanos e incoherencias”, dijo el obispo Daniel Flores, quien pastorea la Diócesis de Brownsville, donde vive la familia Lucio.




