“Es horrible tener que venir a enterrar a mi hijo”. Madre recibe visa humanitaria

TUCSON, Arizona. – Una madre de familia lucha por quedarse en los Estados Unidos, días después de que la agencia de inmigración milagrosamente le concediera una visa humanitaria para sepultar a su hijo, Arath Robles Miranda, quien lamentablemente murió acribillado en Tucson, Arizona.

“Siempre fue bien cariñoso y yo con él, pero no hay palabras de despedida. Nunca me imagine la magnitud de todos sus amigos y primos que nos han apoyado tanto desde el primer momento que nos dijeron la mala noticia,” lamenta la señora Rita Miranda.

Es el temor de toda madre de familia y una realidad a la que ahora se enfrenta: le arrebataron a su hijo. Mataron a quien familiares describen como una promesa del boxeo, quien a través de su música cosechaba popularidad.

Al joven de 19 años identificado como Arath Robles Miranda, la noche del jueves 22 de junio lo encontraron tendido sobre una banqueta cerca de la intersección de la avenida 9 y la calle Ohio en Tucson, Arizona.

Las autoridades detuvieron a Francisco Sillik, acusado de haber descargado un arma de fuego contra la víctima.

Según el reporte oficial que obtuvo Noticias Univisión Arizona, Sillik de 18 años, intento vender algunas pertenencias, entre ellas un rifle AR-15, que le habría robado a la víctima mortal la noche del atraco.

Al presunto responsable lo detuvieron tras un operativo que un equipo táctico SWAT efectuó en una casa ubicada sobre la avenida 7 y calle Michigan Drive.

A la segunda persona, sospechosa de apuñalar a miranda la misma noche, la detuvieron el martes, 27 de junio. Roy Raymond Martínez de 18 años fue ingresado a la cárcel del condado pima enfrentando cargos de homicidio.

“Yo quería llegar a mi casa y encontrármelo en su cuarto y ahora ya no tengo nada para levantarme cada mañana,” comenta la mamá de Arath. Ella llevaba al menos 6 años separada de su esposo e hijo debido a su estatus migratorio.

Le concedieron una visa humanitaria

Recuerda haber llegado a la garita en Nogales, Arizona, esperanzada por cruzar la frontera. Dice que los agentes de inmigración se compadecieron de ella y le concedieron la visa humanitaria, “Yo nomás lloré y lloré. Cuando caminaba, no sé ni a dónde iba.”

La mamá de la víctima confiesa que era casi imposible cruzar a los Estados Unidos, señalando que aún estaba por cumplir un castigo migratorio. Por fortuna, ahora estará protegida por los derechos estatales como víctima de crimen, y la corte requiere de su presencia para presentar una serie de evidencia que abra paso a una sentencia más severa para los presuntos responsables.

José Guzmán, líder de la organización Padres y Parientes de Victimas de Crimen, explica que él tiene muchos años tramitando visas humanitarias y “cuando una persona tiene una orden de deportación es casi imposible conseguir una visa humanitaria; a una en un millón la dejan pasar.”

En casos similares, el director de los servicios fúnebres tendría que enviar una carta de defunción para confirmar dicho delito.

“Sigue la Visa-U, las terapias y acompañamiento a la corte. La Visa-U es una certificación que te da el departamento de la policía en el lugar que sucedió el crimen. Ella califica 100 por ciento.”

Ante esta tragedia, el padre de Arath, José Robles le sugiere a todo padre de familia que “ cuiden a sus hijos. Hay que aconsejarlos bien y fijarse en las amistades que tienen. ¿Quiénes son y con quien andan?”.

Si usted tiene más información con respecto a este caso o si desea ayudar los familiares de Arath Robles Miranda, llame a la fundación Padres y Parientes de Victimas de Crimen al (602) 246-1335.

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