La empresaria Kim Kardashian se unió a la organización Decarceration Collective, una asociación dedicada a la excarcelación de confinados que, entre otras cosas, no han recibido una sentencia justa. El más reciente de los casos en los que se involucró la esposa de Kanye West es el de Kevin Cooper, condenado a la pena de muerte por el asesinato de cuatro personas.