Un mundo de lunáticos: 5 cosas y comportamientos históricamente atribuidos a la Luna

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El satélite de la Tierra es frecuentemente responsabilizado de cosas con las que no tiene nada que ver. Estos son 5 de los mitos más conocidos sobre la Luna.

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1. Luna calva

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La suposición de que las fases lunares alteran los patrones de crecimiento y caída del pelo está bastante extendida. Por lo pronto, la ciencia lo que ha podido establecer es que el pelo crece entre 1 y 1,5 centímetros por mes y que la cabellera (o la ausencia de ella) depende de la acción hormonal sobre el folículo piloso, proceso fisiológico en el que la Luna parece que no tiene nada que ver.

2. Luna mareante

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Se afirma que siendo la Luna capaz de mover enormes masas de agua sobre la Tierra, no puede dudarse de sus efectos sobre los pequeños y humildes humanos. La afirmación de que la Luna es la responsable de las mareas es inexacta. Las mareas son producto del efecto combinado de las fuerzas de interacción gravitatoria entre el Sol, la Tierra y la Luna.

3. Luna de lobos

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Existe el mito de que los lobos le aúllan a la Luna, particularmente a la llena. La ciencia no ha hallado ninguna correlación entre los aullidos lobunos y las fases lunares, salvo que estos cánidos aumentan sus chillidos en las noches claras. Los lobos aúllan por muchas razones, como enviar un aviso a su manada, comunicar su posición, conquistar pareja, anunciar un peligro, alejar a los enemigos y marcar el territorio.

4. Luna criminal

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Existe el mito de que la luna llena aumenta la criminalidad y los policías y bomberos de la ciudad de Nueva York son conocidos por su superstición de detestar trabajar en noches de plenilunio. Las estadísticas no respaldan esta creencia; ni los dementes se desmanda más en luna llena ni los crímenes se incrementan.

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5. Luna menstruante

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Como el ciclo lunar y el periodo menstrual de las mujeres tienen aproximadamente la misma duración, desde la antigüedad se ha especulado sobre su relación y la Luna fue convertida en la diosa de la fertilidad en varias culturas. En verdad, el ciclo lunar es de 29 días, pero el de la menstruación varía en un rango de 23 a 35 días, por lo que su duración de 29 es solo un promedio aritmético. Además, los ciclos no son coincidentes ni entre todas las mujeres ni entre estas y las fases lunares. En otros mamíferos los ciclos menstruales son muy diferentes.