Mujeres, cultura y turismo: de las mujeres jirafa a las bailaoras de flamenco

La cultura popular de cada país o territorio se ha encargado de moldear a su alrededor un particular microcosmos de tradiciones, ritmos y rituales convertidos hoy día en su particular proyección (y atrayente) hacia el mundo exterior.

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En medio de tan carismática cultura, las mujeres parecen desempeñar un papel mucho más vistoso, tal y cómo rezan los ejemplos que configuran este recorrido feminista por el turismo, la cultura y las mujeres

Mujeres jirafa (Tailandia)

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El ejemplo más famoso (y también polémico) de este repaso recae en las mujeres jirafa pertenecientes a la tribu Kayan, las cuales conviven en diferentes poblados al norte de Tailandia, país al que llegaron a principios de los 90 como refugiadas desde la vecina Birmania.

Años después, el gobierno tailandés advirtió su potencial turístico para atraer a numerosos turistas que se dejaban caer por la zona para admirar a estas mujeres silenciosas que lucían grandes collares alrededor del cuello por diferentes motivos que van desde sus orígenes tribales hasta la protección contra el ataque de los tigres. 

Geishas (Japón)

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En los barrios de Kioto, una mujer envuelta en un kimono camina de forma enigmática sujetando un paragüas, sin apenas mostrar ese rostro empolvado y sus labios rojizos. La geisha (nombre que significa "artista") constituye uno de los más delicados encantos de Japón y, a la vez, uno de los más malinterpretados por un mundo occidental que las sigue considerando prostitutas.

Consideradas mujeres del entretenimiento, las geishas llevan amenizando las fiestas con sus juegos, conversaciones y exhibiciones desde el siglo XVIII, época de esplendor de estas doncellas orientales cuya actividad ha disminuido de forma considerable durante las últimas décadas.

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Bailaoras de flamenco (España)

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Cualquier visita a España finaliza en un típico combo de tapas y flamenco, estilo musical típico de Andalucía ejecutado por esbeltas mujeres llamadas bailaoras cuyo taconeo se convierte en el sonido más típico de los escenarios sureños.

De fondo, una música sensual emana acompañada de guitarras, colores tenues y atuendos rojizo, impulsando el arte de bailaoras (y respectivos masculinos) entre las que destacan celebridades consagradas como Sara Baras y Ángeles Gabaldón, figuras de un estilo de cante y danza considerados terapéuticos, como bien demuestra la flamencoterapia.

Palenqueras (Colombia)

Cuando nos dejamos caer por el barrio de Getsemaní, en Cartagena de Indias, comprobamos el encanto exótico de esas paredes coloniales, los ritmos de cumbia que suspiran los locales, la paleta de colores de un arte callejero en potencia y los contoneos de las famosas palenqueras, mujeres afrocolombianas procedentes de San Basilio de Palenque, el considerado como primer pueblo libre del continente americano.

Estas mujeres vestidas con atuendos coloridos se pasean transportando canastos de fruta sobre la cabeza, contando anécdotas a los turistas y celebrando la vida a golpe de baile por las calles de la ciudad portuaria más importante de Latinoamérica.

Passistas (Brasil)

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Este es sólo uno de los muchos nombres femeninos que engloba el mayor espectáculo del mundo: el Carnaval de Brasil, famoso por sus mujeres de cuerpos esbeltos y aderezos emplumados que marchan por las calles de las principales ciudades brasileñas, agitando sus caderas al ritmo de la samba cada mes de febrero. Las passistas son las diferentes bailarinas que animan al resto de escuelas de salsa, mientras que las rainhas de bateria ayudan a los jefes orquesta a llevar la percusión y la famosa Reina del Carnaval se convierte en la culminación de este huracán de colores en el que los ojos de medio mundo están puestos en sus sensuales bailarinas.

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Estos cinco ejemplos de mujeres, cultura y turismo procuran obviar otros muchos de carácter más misógino o degradante que, por desgracia, aún prevalecen como principal reclamo turístico en numerosos lugares del mundo. 

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¿Eres de las que apoyan el encanto de este recurso o de las que, al contrario, opina que son degradantes en algunos casos?