Los efectos de la ingravidez de un viaje a Marte

Algunas veces las estrategias utilizadas por los científicos para experimentar los resultados de futuras investigaciones suelen ser poco ortodoxas. Este es el caso del experimento presentado a continuación, el cual consistió en pasar dos meses en una cama sin tener ningún contacto con el exterior.

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El experimento fue una fase de una investigación subvencionada por la ESA (Agencia Espacial Europea) para conocer los efectos que un futuro viaje a Marte podría tener sobre los astronautas que participan del vuelo a causa de la experimentación de ingravidez que ese viaje tiene implícito.

Para averiguar los efectos de esta ingravidez se pensó en un medio que la reproduzca lo más fielmente posible, y los investigadores dirigieron sus miradas hacia una cama. Para esto escogieron seis voluntarios aficionados al deporte para pasar dos meses inmovilizados en una cama sin tener ningún contacto con el exterior ni tocar el suelo en ninguna ocasión (incluso para cuestiones higiénicas).

De este modo se lograron medir cuáles serían los efectos que la ingravidez tendría sobre nuestro cuerpo, pues al mantener inmóviles los músculos durante tanto tiempo se podrían sufrir riesgos de fracturas.

Las conclusiones señalaron que la masa ósea de los individuos se redujo notablemente, incluso en el caso de dos de los voluntarios, a quienes se los sometió a ejercicio cada dos días para evaluar los cambios que la ingravidez podría causar en ellos en relación con sus compañeros. Sin embargo, su masa ósea se redujo en un 4%.

La utilidad de este estudio es muy importante, pues permite conocer cuáles serían los efectos de un posible viaje a Marte. Pero el método utilizado resulta hasta polémico a pesar del consentimiento de los voluntarios con él. De todos modos los voluntarios obtuvieron una jugosa recompensa de 8.000 euros por la prestación de sus servicios.

VIA | El Mundo