La devastadora realidad de las morsas en 'Our Planet' de Netflix nos obliga a tomar conciencia

Durante un episodio de la nueva serie documental de Netflix, Our Planet, pudimos ser testigos de una realidad realmente triste y cruda. En la desesperación por encontrar lugares sustitutos a sus hábitats naturales (que están a punto de desaparecer por el cambio climático), los animales acuáticos intentan adaptarse a condiciones en las que acaban muriendo en su mayoría.

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Este es el caso de las morsas que viven en el norte de Rusia. Ante la falta de hielo marino, estas gigantes del Ártico se desplazan hacia áreas rocosas y suben acantilados pero, al momento de bajarlos, terminan con el peor de los destinos.

La triste realidad de las morsas del Ártico

Las morsas del Norte helado se están trasladando a los lugares más inhóspitos para su especie con tal de sentirse seguras y no morir aplastadas por ellas mismas. Y es que al estarse derritiendo el hielo marino, estos animales se acumulan en lugares pequeños, unos encima de otros, para descansar fuera del agua luego de alimentarse.

Muchas de ellas prefieren estar un paso más lejos y, para ello, escalan enormes acantilados rocosos buscando tener espacio. El problema es que necesitan volver al agua tarde o temprano, y bajar de esos sitios peligrosos generalmente no acaba bien.

Además de ser muy pesadas y tener movimientos bastante limitados, estas morsas tienen mala visión, por lo que terminan cayendo al vacío desde grandes alturas y muriendo de la manera más triste que podamos imaginar.

Así lo muestra la serie de Netflix, en lugar de presentar lo bonito de la fauna y la naturaleza, intenta concientizarnos sobre la situación crítica en la que se encuentra nuestro planeta a raíz de la actividad humana. Sus episodios exploran en lo más oscuro y crudo de la vida de los animales en los diferentes ecosistemas. Y la escena de las morsas nos rompe el corazón en mil pedazos:

Por otro lado, un reportaje de la revista The Atlantic informa que hay expertos en morsas que no atribuyen la causa de las caídas estrechamente al cambio climático. Por ejemplo, las morsas podrían estar intentando escapar de sus depredadores (si bien esos casos solían ser más raros anteriormente).

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O sea, aunque otras posibilidades pueden explicar la devastadora escena que vemos con estos animales, no hay dudas de que el cambio climático afecta profundamente su vida y el estado de sus hábitat naturales.

Los lugares del mundo y especies maravillosas que presenta Our Planet están realmente en peligro y en un camino ya prácticamente sin retorno. Es por eso que los humanos debemos actuar cuanto antes para evitar no solo que más morsas mueran drásticamente, sino también que nuestro planeta se destruya por completo.

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