10 cosas que no debes hacer al ir de compras a una boutique de ropa

Aunque ya tengo experiencia en la atención a clientes, nuca había trabajado en una boutique de ropa. 

Y si bien mientras soy consumidora trato de portarme lo mejor posible, cuando estás de este lado te puedes dar cuenta de comportamientos que en la euforia de las compras solemos tener y que no son nada agradables. Aquí te dejo algunos...

#1 Pedir que adivinen tu talla

La primera vez que una compradora me dijo “búscame una talla para mí” no sabía si se refería a la talla correcta o a la que quería escuchar. Así que para evitar esta confusión, cuando acudas a una boutique especifica qué tipo de ropa buscas y cuál es la talla que normalmente usas; la vendedora te hará mejores recomendaciones.

#2 Comparar la tienda con otras

Si la ropa que venden en el lugar no es de tu agrado, no es necesario que lo enfatices: “esta ropa es para puras flacas como tú”, me comentaron unas personas mientras se retiraban enojadas de la boutique. Hay que entender que el público es diverso y por ello es que hay ropa formal, deportiva, infantil, para damas o caballeros y muchas variantes más.

#3 Pedirle a la vendedora se pruebe la ropa

Si bien el puesto de trabajo implica atender al cliente y asesorarlo con su compra, no le pidas que se pruebe la ropa y la modele para ti. En primer lugar es incómodo y en segunda puedes obligarla a que rompa las reglas de su empresa. 

#4 Salir en ropa interior del probador

No importa qué tan desinhibida seas, salir del probador en ropa interior no sólo te expone, sino que es una falta de respeto para quien esté en la boutique, desde los empleados hasta los demás clientes.

#5 Olvidar que hay más clientes

Si llegas a una boutique y eres la única, seguramente de manera automática recibirás un trato más personalizado, pero no lo pidas si hay más gente, recuerda que la educación va primero y todas tenemos que iniciar con el ejemplo. Espera tu turno, pide las cosas de forma amable y no agobies a las vendedoras con peticiones exageradas como subirse a la escalera para quitarle los aretes al maniquí mientras hay más gente esperando.

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#6 Pedir que rompan las reglas por ti

Los mexicanos estamos acostumbrados a regatear precios y pedir excepciones, pero por algún lado hay que comenzar a cambiar esta manera de pensar. Si bien no es tan grave preguntar por algún descuento, tampoco hay que insistir hasta la incomodidad.

#7 Desordenar la ropa

Parece fácil, pero acomodar la ropa en ganchos, por tallas, modelos, colores y secciones y tener que repetirlo a cada minuto no es sencillo, así que procura no hacer tanto desastre al buscar ropa, seguro alguien lo agradecerá.

#8 Responsabilizar a las empleadas sobre tu compra

“¿Estás segura de que le va a quedar”? Este tipo de preguntas no pueden ser resueltas por las vendedoras; seguro harán su mayor esfuerzo en recomendarte una prenda de acuerdo con las características que buscas, pero no la responsabilices por la decisión.

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#9 Pedir opinión y molestarte

Si no estás segura de qué comprar o si la prenda no te convence, pedir otra opinión es válido, pero no te molestes si no es lo que quieres escuchar.

#10 No saber qué quieres comprar

Si no estás segura de qué quieres comprar, tómate tu tiempo, igual puedes pedirle a la vendedora que te dé unos minutos mientras te familiarizas con la mercancía y así evitas que te agobien con preguntas y tampoco la distraes de otras actividades.

Por experiencia te digo que si aprendemos a ser buenas consumidoras, además de aprovechar nuestro tiempo y dinero crearemos una mejor impresión y seguro a la siguiente las mismas vendedoras se sentirán gustosas de atendernos.