¿Por qué muchas mamás están usando humidificadores para sus bebés? ¿Son seguros?
En los últimos años se han puesto de moda los humificadores e incluso hay quienes suelen recomendar su uso para bebés. Tan solo basta con teclear ‘humificador para bebés’ y aparecerán un montón de modelos en Internet.
Por esa razón es importante conocer para qué sirven los humificadores, los beneficios que puedan aportar a los pequeñines del hogar y qué se debe tomar en cuenta para elegir uno.
¿Qué es un humificador?
Un humificador es un pequeño aparato que tiene un depósito para agua, al encenderlo, el líquido se transforma en vapor y se expulsa hacia el ambiente.
Su objetivo es mejorar la humedad de una habitación y hacer que el aire sea menos agresivo al momento de respirarlo.
El sistema respiratorio y la piel de los más pequeños es muy sensible a los agentes del medio ambiente, así que muchos especialistas recomiendan mantener la humedad del hogar entre el 30% y el 50%.
Para poder medir la humedad es necesario un higrómetro, el cual se puede encontrar fácilmente en ferreterías.
Beneficios del humificador
El uso de un humificador en bebés es recomendado, particularmente, para aquellos que nacieron en una zona árida o en climas fríos. Esto se debe a la poca humedad que hay en el aire en dichas condiciones atmosféricas.
El uso de estos aparatos ofrece dos beneficios importantes para el bebé. Uno de ellos es mantener su piel y labios hidratados. El segundo, y más importante, es prevenir y aliviar las molestias provocadas por la congestión nasal.
Qué tipo de humidificador se debe elegir
Si bien el uso de humidificares con niños pequeños no representa ningún peligro, por precaución se debe elegir uno que produzca vapor frío.
Así se evita el riesgo de quemaduras, en caso de que el niño se acerque por curiosidad o tire accidentalmente el aparato.
Los humidificadores de vapor frío utilizan la electricidad para crear vapor que se enfría antes de salir de la máquina. Por esta razón, son recomendados por la Academia Americana de Pediatras.
No importa si el vapor es frío o caliente, porque los beneficios son los mismos, eebido a que alcanza la temperatura del ambiente para el momento en que el vapor llega a las vías respiratorias del nene.
Cómo usar un humificador
Un aspecto importante es que sólo se debe agregar agua al humificador, porque no todas las esencias y aceites son seguras para los bebés.
Si se desea implementar alguna opción de aromaterapia, primero se debe consultar con su pediatra.
Un humidificador es muy sencillo de usar; aunque todo depende del modelo, por eso hay que leer cuidadosamente las instrucciones.
En general, un paso importante es limpiar a profundidad cuando se haya terminado de usar para que no aparezca moho.
También hay que utilizar agua embotellada o purificada, debido a sus bajos niveles de minerales. Además, no se debe dejar estancada por un lapso mayor a 3 días, porque puede crear bacterias.
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