Los primeros pasos del bebé representan uno de los triunfos más grandes en su desarrollo, pues indica un avance en sus habilidades motrices y de coordinación.
Mi bebé no quiere caminar sin ayuda: ¿hasta qué edad es normal?
Por:Carolina Lomas
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades explican que algunos pequeñitos están listos para iniciar este aprendizaje entre los 7 y 8 meses de edad, mientras que otros tardan un poquito más.
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Una vez que tu hijo desarrolle la fuerza necesaria para soportar su peso y mantener el equilibrio, empezará a moverse con mayor agilidad y rapidez.
Si tu chiquitín ya cumplió un año y no muestra interés por realizar esta actividad o no puede caminar por sí solo, podría ser una señal de alerta en su desarrollo. Te explicamos todo lo que debes saber al respecto.
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Mi bebé no camina sin ayuda: ¿qué significa?
De acuerdo con Andrea Diaz Mendoza, psicóloga y experta en trastornos del habla, si tu pequeño aún no puede caminar solito es porque sus músculos no son lo suficientemente fuertes para soportar su propio peso.
A partir de los siete meses de edad, el bebé tendrá mayor control sobre su columna y piernitas. No obstante, será entre los 9 y 15 meses que empezará a hacer esta actividad por sí solo.
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La Dra. Laura E. Marusinec, pediatra del Hospital Infantil de Wisconsin, argumenta que los chiquitines que nacen prematuramente, con bajo peso o lesiones neurológicas pueden retrasarse en alcanzar hitos evolutivos como sostenerse solitos.
Asimismo, el Dr. Jean-Francois Lemay afirma que algunos bebés pueden esperar hasta los 18 meses para caminar. Según el experto, si se presentan problemas de movilidad al llegar los 20 meses, será necesario acudir al pediatra a la brevedad.
«Este desfase es ocasionado por una deficiencia en sus habilidades motrices y un tono muscular demasiado rígido o blando. Si no es tratado a tiempo, afectará otras metas de desarrollo», menciona.
Si tu hijo tiene más de un año y aún no puede dar sus primeros pasos, se le dificulta agacharse o llora y se queja cuando lo pones de pie, es señal de que algo anda mal.
En estos casos, es recomendable visitar a su pediatra de cabecera o fisioterapeuta, para empezar el tratamiento adecuado y descartar algún trastorno del movimiento.
Ejercicios para estimular al bebé
#1 Bicicleta imaginaria
Acuesta a tu pequeñito en una manta, toma sus piernitas e imita el pedaleo de una bicicleta. Luego, llévalas hacia su abdomen y estíralas hacia arriba con suavidad.
La Dra. Augusto Franco Andrade, terapeuta kinesióloga y experta en educación infantil, subraya que este ejercicio servirá para fortalecer sus piernas y desarrollar los músculos de sus muslos y pantorrillas.
#2 Siéntalo en un taburete
Los bebés pueden practicar esta habilidad sentándose en una silla o taburete. Busca uno que sea de su altura (los piecitos deben tocar el piso), haz que tu peque se ponga de pie y recoja un objeto, luego pídele que vuelva a sentarse.
La página especializada The Bump argumenta que esta actividad obliga al bebé a pararse sin ayuda, permite que trabaje en su equilibrio y lo acostumbra a tener peso en los pies.
#3 Ponlo de pie
Párate detrás de tu hijo, coloca las manos en sus axilas y haz que se levante. Con mucho cuidado y delicadeza, jala un brazo hacia adelante y luego el otro; con este movimiento sus piecitos lo seguirán naturalmente.
Este ejercicio lo animará a dar sus primeros pasos y lo acostumbrará a sostener su cuerpo, afirma la organización Primrose School.
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Finalmente, asegúrate de brindarle un entorno atractivo y amoroso que lo anime a seguir aprendiendo.
Así favorecerás su crecimiento y lo ayudarás a recibir las etapas que se aproximan con todos los conocimientos necesarios. Suena muy emocionante, ¿no lo crees?
Y tú ¿cómo impulsas el desarrollo de tu pequeñito? Cuéntanos en los comentarios.
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