La llegada de tu bebé puede ser la experiencia más emocionante que hayas tenido, una para la que nadie te preparó. Pero eso no quita el hecho de que es súper agotador estar al cuidado de otra persona las 24 horas del día y con toda la responsabilidad no sólo de su supervivencia, sino de su bienestar y confort. Por eso, debes encontrar maneras de mantener la cordura, de que el estrés no te sobrepase y que no te vaya a invadir la depresión posparto.
La depresión posparto SÍ se puede evitar: 10 consejos de los expertos

#1 Mantén expectativas realistas
Comienza por bajar tus expectativas acerca de la maternidad, nada es como te lo imaginabas y mucho menos es como en la tele, las películas o tan perfecto como en las revistas. Tu bebé no recibió instrucciones y seguramente no hará las cosas como te dijeron que debía de ser.
#2 Ignora consejos no pedidos
Hay mucha gente bien intencionada, llena de conocimientos y dispuesta a compartirlos, pero tú tienes derecho a negarte a escuchar a quién sea que no tengas ganas de oír. La mamá eres tú, y los que deciden son los padres. Ignora cualquier información confusa o que no venga de alguna persona a la que tú hayas acudido a pedir consulta o de su padre.
#3 Que alguien más se encargue de limpiar

Recuérdate a ti misma que en este momento estás maternando a un bebé recién nacido, no te estás postulando para el premio de Administración del Hogar del Año, por lo tanto, date chance de dejar de limpiar, recoger, ordenar y no te angusties si la casa no está tan presentable como de costumbre. En cualquier caso, si no vives sola, le toca también a las otras personas de la casa el darle mantenimiento al hogar. Incluso, cuando te pregunten si hay algo que puedan hacer por ti, señálales la pila de platos y ropa por lavar.
#4 Acepta todo tipo de ayuda y regalos
Volviendo al punto anterior, acepta toda la ayuda que te ofrezcan. No es momento de ser orgullosa, por el contrario, es un momento en el que puedes darte la oportunidad de mostrarte vulnerable, como cualquier mamífero que acaba de parir y pedir y aceptar ayuda. Si alguien quiere cuidar, sostener o atender a tu bebé, diles que sí y aprovecha esos valiosos minutos libres para darte una ducha, tomar una siesta o tomar aire.
#5 Sé clara al expresar tus necesidades
Se tan asertiva como puedas, sé clara en lo que necesitas. Si tus amistades quieren visitarte, pero tú necesitas tiempo a solas, pídelo. Si quieren darte un regalo y no saben qué, externa tus necesidades. Si necesitas compañía, o alguien que te lleve a cenar y pasar un rato con personas adultas, pídelo. No desestimes tus emociones y necesidades, exprésalas. Debes aprovechar que en este momento todos quieres apoyarte a ti y tu recién nacido.
#6 Reparte las tareas

Permite que hagan cosas importantes por ti, como hacerte una comida, o varias. Ir de compras y llenarte la alacena. Apoyarte en la limpieza, mandarte comida ya preparada a domicilio. Sacar a pasear o cuidar a tus otros hijos, si ya los tienes, o atender a tus mascotas. Comprarte una tanda de pañales. Acepta también todo aquello que te haga sentir bien: libros, chocolates, una ida al cine, una tarde de spa, recuerda que ser mamá es parte de tu vida, pero no es lo único que eres ahora.
#7 Ten una vida
Sal a pasear, aunque sea sola. Tomar aire y sol son una parte básica e indispensable para mantener el buen ánimo, además de que el sol,estimula que la vitamina D se fije en el cuerpo. Mantén tus amistades. Si no puedes salir a verles y aún no quieres visitas, llámales o escríbeles. No permitas que la entrada a la maternidad te excluya de mantener tus relaciones sociales. Sal aunque sea al súper. Ve al gimnasio, a un curso de mamás y bebés. Ten conversaciones con personas adultas.
#8 Haz cosas que te alegren el día
Escucha música. Come rico y nutritivo. Baila con tu bebé. Descansa siempre que puedas. Mírate al espejo y tómate fotos. Sonríete, háblate bonito. Acabas de crear una vida, te mereces felicitarte por ello. Crea un blog, canal de youtube, cuenta de instagram y comparte tus experiencias.
#9 Acércate a tu pareja

Si maternas en pareja, acércate a tu pareja. Retoma el sexo tan pronto te apetezca otra vez. Mientras, tengan besos, caricias, palabras dulces, abrazos. Ten citas a solas con tu pareja, dense la mano en la calle, salgan a pasear juntos, díganse cuánto se aman y cómo confían mutuamente para tener la aventura de criar en pareja.
#10 Cuida tu salud emocional
Si sientes que tus ánimos decaen, busca ayuda profesional. Acude a meditación, haz terapia, ve a pilates, corre por la mañana en cuanto termine la cuarentena, haz terapia canguro y ten mucho contacto piel con piel con tu bebé, procura la lactancia (la producción de leche estimula la segregación de hormonas que regulan el ánimo) y regresa a tu trabajo y/o actividades regulares de antes de bebé.
Pero recuerda la primera recomendación: baja tus expectativas, no eres súper mujer y nada será como antes de la llegada de tu bebé, ni como lo imaginabas en tu cabeza. Deja que todo fluya y acepta la vida como viene, después de todo, es lo que hay y con eso hay que trabajar.
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