El cansancio, el enemigo de chicos y grandes

Hace un tiempo en De mamá a mamá te contaba mis experiencias con los primeros berrinches de mi bebé. Con dos años ya cumplidos los berrinches siguen firmes, cada vez más aparatosos y escandalosos...

Hay días e incluso semanas que pasan desapercibidos, pero cuando está cansado es probable que si se enoja por algo aparezca una rabieta, berrinche o pataleta. Lo que he notado también es que el cansancio me puede jugar muy malas pasadas también a mi, transformando un simple berrinche en un momento realmente agotador, física y psíquicamente.

Buen descanso para evitar malos momentos

Descansar es fundamental, no solo para los más pequeños, una mala noche o acostarnos muy tarde puede llevar a que al día siguiente no estemos “con todas las pilas” y por lo tanto nuestro nivel de tolerancia no esté muy alto, y la verdad es que pareciera que ellos lo notaran.

Si hay algo que he descubierto desde que soy madre es lo paciente que hay que ser. De nuestra paciencia depende que nuestro o nuestros hijos aprendan a hacer cosas solitos e incluso que frente un mal comportamiento no terminemos a los gritos o enojadas. Tener paciencia no es fácil, para lograrlo te recomiendo: Cómo tener más paciencia con los hijos.

Relajarnos y pedir ayuda

Para esos momentos en los que necesitamos “un brake”, un descanso, para respirar, relajarnos un poco y tomarnos un ratito, no hay nada mejor que reservar esas actividades que sabemos que nuestro pequeño disfruta y se entretiene solito, mientras nosotras disfrutamos de un té por ejemplo.

Salir a dar un paseo con el cochecito, pintar, jugar con bloquecitos. También podemos recurrir a familiares o amigos, pedir ayuda a alguien para tomarnos un buen baño caliente puede ser una buena idea.

Todos podemos tener un mal día, pero no hay que involucrar a los más pequeños, ellos no entienden y seguro que cuando volvemos del trabajo nos están esperando para jugar.

Cabe destacar que los niños son muy suceptibles, especialmente cuando hay un clima tenso, así que probablemente, si nosotras no estamos muy bien ellos tampoco, lo que complica aún más la ecuación.

Afortunadamente siempre hay alguien dispuesto a darnos una mano para que nosotras podamos tomarnos un ratito para descansar, reponernos y estar 100% para nuestros hijos.

Recuerda que ellos van a ser pequeños solo una vez y disfrutarlos al igual que mimarlos y educarlos es fundamental para su desarrollo, no hay nada más lindo que sentirse querido, más aún si es por mamá.