La Mastitis es un problema que enfrentan varias mamás durante el período de lactancia, y consiste en una obstrucción de los canales de salida de leche por el pezón, lo cual implica diversas complicaciones en la mamá, ya que los síntomas no sólo se restringen al seno, sino que abarcan muchas más áreas.
¿Cómo evitar la mastitis?

Si bien el pecho se inflama, se pone rojo y se experimenta un intenso dolor, la mamá con mastitis también experimenta otro tipo de complicaciones similares a las de un estado gripal agudo, con fiebre, náuseas y vómitos.
Prevenir la mastitis es fácil, pero una vez consumada ésta ya se torna una tarea un tanto más ardua y se requiere mucha paciencia. A continuación, a pedido de una de nuestras lectoras, te mostraré algunas recomendaciones para tratar la mastitis una vez que ésta se ha instalado.
En primer lugar las plantas medicinales pueden darte una mano importante en relación a este problema, pues éstas son capaces de eliminar los síntomas y la infección que la mastitis supone. El tomillo, el ajo y la cebolla tienen propiedades antibacterianas y pueden eliminar la infección.
También una buena solución es, obviamente, recurrir a los antiinflamatorios y antibióticos de la medicina tradicional, aunque aplicar paños fríos y calientes alternados permiten dilatar los canales de lactancia para que ésta salga con mayor facilidad.
Intenta que la leche salga de tus pechos no sólo mientras le das de mamar a tu bebé. También procura utilizar medios artificiales para facilitar el drenaje de leche, y sobre todas las cosas, descansa bien y procura no estresarte, pues el cansancio y el estrés son dos importantes causas de la mastitis.
Vía | Terra









