Si vamos a un partido de fútbol entre equipos de niños vamos a sorprendernos de las reacciones de muchos de los padres y madres que allí se encuentran. El gran error de los padres es verse reflejados en los hijos y querer que ellos actúen como lo hubieran hecho ellos pero en el caso del deporte. Entonces, ¿ cómo debemos actuar si nuestro hijo despunta en el deporte?
Cómo actuar si nuestro hijo despunta en el deporte

Los padres no deben de olvidar que los niños deben de jugar y divertirse. Trasladar el mundo de los adultos a los niños a esas edades es peligroso ya que ellos no están preparados para sentir las responsabilidades, las presiones, el estrés, etc de los mayores y además, tampoco necesitan eso. Ellos necesitan tener el apoyo de sus padres en el éxito y el fracaso para que puedan percibir que lo importante es realizar deporte y no el resultado. Esto vendrá mas adelante.
El comportamiento de los padres con sus hijos cuando estos practican deporte es más importante de lo que pensamos.
Qué no debe de hacer un padre con su hijo
Lo primero que no se debe de hacer como padres, es obligar a los hijos a realizar algo que no quieren,. Se les puede invitar a realizar algún deporte y se les puede dar a elegir entre varias opciones. El niño debe de elegir el deporte con el que más cómodo se sienta de tal forma que pueda practicarlo más adelante.

La regla principal es la de la diversión. Los padres deben de aprovechar cualquier deporte para poder pasar tiempo junto a sus hijos y tener una relación cada vez mas sólida, Los padres que exigen demasiado a sus hijos en el deporte lo único que van a conseguir son niños frustrados y fracasados porque rara vez van a alcanzar los altos objetivos que se les impone. el único objetivo, repetimos, es la diversión sana y compartir a la vez que se ejercita el cuerpo físico.
En el caso de que el niño despunte realmente en algún deporte, más adelante se podrá realizar lo que haga falta para poder encauzar esas actitudes.
Hay que ayudar a los niños a que aprendan a perder antes de que la derrota deje secuelas en ellos así como en la relación entre padres e hijos.
Errores comunes de los padres
Los padres deben entender que sus hijos son personas independientes y no deben de reflejar los gustos y deseos de sus padres. Ellos son personas con sus propios gustos y anhelos que poco a poco irán floreciendo de forma espontánea.

Apuntar a interminables horas de clases deportivas con diferentes entrenadores todos los días puede ser de lo más estresante para un niño que además de estudiar necesita jugar y mucho tiempo de ocio y de estar con sus padres.
El mal comportamiento de los padres del cual hablábamos al principio es uno de los peores ejemplos que le podemos dar a nuestros hijos, una pésima referencia de violencia, falta de respeto y tolerancia y de no saber perder.
Como padres, entendamos el deporte como un momento de sano ocio en el que podemos estrechar relaciones con nuestros hijos y no como un momento de competición en el que lo importante es ganar.









