Le dicen culebrilla y se tejen muchos mitos a su alrededor; pero esta enfermedad es más conocida en el mundo médico como herpes zoster y se trata de un sepa más agresiva que la varicela. En muchos casos las personas que le experimentan son mayores y posiblemente no experimentaron la varicela cuando fueron niños. Para derribar aquellos mitos sobre la culebrilla o herpes zoster hoy te diremos cómo se contagia la culebrilla.
¿Sabes cómo se contagia la culebrilla?

Propagación de la culebrilla
Ni se trata de una culebrilla al interior del cuerpo, ni mucho menos se contagia con la mirada, tampoco se propaga por cuenta de un estornudo, tos o contacto casual. Usualmente la transmisión de esta enfermedad se presenta cuando la erupción se encuentra en fase de ampolla.

Cuando se formen costras en las ampollas del paciente con culebrilla por lo general la persona deja de ser contagiosa, si la persona lleva su cuerpo cubierto el riesgo de contagio disminuye. Lo mejor para prevenir el contagio es:
- Mantener la piel con sarpullido cubierta.
- No tocar o rascar el sarpullido
- Lavarse las manos con frecuencia para prevenir la propagación del virus
Existen algunos grupos de personas que podría correr mayor riesgo de contagio, razón por la cual deberán tener más cuidados en lo que se refiere. Estas personas son:
- Bebés
- Mujeres embarazadas
- Personas en condición de inmunodeficiencia
- Adultos mayores
Cómo evitar el herpes zoster
Lo primero que hay que decir es que para evitar el herpes zoster debes empezar con precauciones para evitar la varicela. Una vacuna contra la varicela ya fue inventada y está disponible para las personas que pueden estar más propensas a experimentar herpes zoster si hacer parte del grupo de riesgo. Sobre la vacuna se recomienda una sola dosis. Sin embargo, más vale atender las recomendaciones del especialista.

Si presentas culebrilla o herpes zoster no hay que preocuparse porque ya existen medicamentos que pueden ayudarte con el alivio en cuanto a dolores e infecciones. De alguna manera disminuirán los efectos del herpes zoster.
De todas maneras vale aclarar que estos medicamentos deben ser recetados porque la automedicación es un riesgo que no vale la pena correr. Aunque sabemos que el dolor es muy fuerte y parece inmanejable lo correcto es que te sometas al diagnóstico de médico que pueda asesorarte muy bien.
¿Cuál era el mito que tenías sobre el culebrilla?








