Alicabi, capulí, tomatillo inglés o farolillo son algunos de los nombres con los que se conoce el alquequenje, una planta que crece en territorio europeo y sudamericano. Suele aparecer en los viñedos y los bosques, y aunque su frecuencia no es amplia, vale realizar una buena búsqueda para toparnos con ella.
Propiedades de las bayas de alquequenje

Podemos reconocerla fácilmente por sus bayas rojas o anaranjadas, las cuales tienen un delicioso sabor agridulce y que pueden combinarse con un buen vino para intensificar su sabor. Además de ello, las bayas cuentan con propiedades medicinales de las que hablamos a continuación.
Estas bayas contienen vitamina C y ácidos orgánicos (ácido cítrico y ácido málico). Además es rica en caroteno ( vitamina A) y contienen alcaloides. Toda esta composición le otorga a las bayas de alquequenje propiedades diuréticas y depurativas, y además es útil para eliminar el ácido úrico.
Las bayas son útiles para personas que sufren de enfermedad de la Gota o artritis úrica, y también para la litiasis urinaria, pues hacen posible la disolución de los cálculos de sales uricas.
Se pueden consumir 10 o 20 bayas frescas en la mañana y al medio día, o bien en decocción de 50 a 100 gramos por litro de agua.








