La musicoterapia se ha convertido en uno de los tratamientos alternativos para la depresión que -junto al estrés y la ansiedad- se ha vuelto uno de los desórdenes con mayor incidencia y repercusión en nuestra vida diaria.
Musicoterapia para tratar la depresión

Se asocia a la depresión con una disminución considerable de la calidad de vida, declive del funcionamiento social y aumento de la mortalidad de quienes la padecen, además de afectar también a aquellos que conforman su entorno.
Se ha encontrado que la musicoterapia puede ser considerada un anti-depresivo, pues conlleva a mejorar el humor en las personas, a que éstas tomen una actitud positiva y ayuda a incrementar de igual forma la expresión de los problemas.
Es a través de estos beneficios que se ha comprobado el efecto positivo de la musicoterapia para tratar la depresión (hasta el momento sumado a otros tipos de tratamiento). Se han realizado estudios comparando personas que reciben tratamiento con música en contra de aquellos que lo reciben sin música, y se ha encontrado una reducción en los síntomas depresivos de las personas cuyos tratamientos (psicoterapia generalmente) incluyen música.
La musicoterapia en estos tratamientos implica crear sonidos con algún instrumento, canto improvisado, baile o pintura al ritmo de la música o solamente escuchar, siendo los estilos más utilizados la música clásica y los sonidos de la naturaleza.






