Es normal que, cuando existe una emergencia sanitaria como el ébola, nos asustemos bastante. Nadie quiere enfermarse, es un hecho, y menos con una enfermedad que puede ser tan mortal como la producida por este virus. Pero, ¿es realmente tan contagioso el ébola?
¿Es el ébola realmente tan contagioso?

Hoy te contamos un poco más sobre esta enfermedad, comparándola con enfermedades infecciosas que también pueden ser muy dañinas.
¿Qué es el R()?
Cuando el primer caso de ébola en Estados Unidos se dio, los médicos estaban bastante seguros de que, a pesar de que el hombre había estado 4 días enfermo antes de llegar al hospital, esto no sería un gran problema ni convertiría a la enfermedad en una pandemia.
Pero, ¿cómo podía ser que estuvieran tan tranquilos con algo tan terrible? El hecho es un factor llamado R(). El número de reproducción es un término matemático que te dice qué tan contagiosa es una enfermedad vírica, dando un promedio de la cantidad de personas que contraen la enfermedad de un infectado en un brote.
Un ejemplo claro es el sarampión, una de las enfermedades más contagiosas: su R() es de 18, es decir que una persona con el virus infecta en promedio a 18 más, en un ambiente en que nadie está vacunado. Por el otro lado tenemos enfermedades como el SIDA (producida por el virus del VIH), que tiene un R(4); si bien es un gran problema esta enfermedad, lo cierto es que su contagio es mucho más difícil.
Ver más: ¿Cómo se contagia el ébola?

¿Y en el caso del ébola?
El ébola tiene un R(2). Bajo, ¿verdad? Muchos seguro se preguntan cómo consiguió afectar tanto en África, y lo cierto es que allí, donde la enfermedad parece estar fuera de control también, cada persona infectada tan solo infectó a dos personas más.
Debemos tener en cuenta muchos factores a la hora de hablar del R(). En primer lugar, tener en cuenta durante cuánto tiempo una persona con el virus es capaz de contagiarlo, así como también cuántas partículas de ese virus se necesitan para enfermar a alguien. Además, en el caso del virus del Ébola, el modo de contagio también ayuda a que el número sea bajo: solo se contagia mediante el contacto directo con fluidos –como vómito o sangre– de alguien infectado.
Si bien el número puede parecer bastante bajo, crece en cantidad: una persona infecta a 2, que a su vez infectan a 4, y esos 4 a 16 más… Y así seguimos. Solo en el caso de que tengamos un R() menor a 1, logramos que la epidemia se extinga. El problema aquí es el sistema sanitario: un buen sistema sanitario, del que lamentablemente se carece en los países infectados por ébola de África, toma las medidas adecuadas, entre ellas el poner en cuarentena a toda las posibles personas que hayan estado en contacto con un paciente infectado para evitar que el virus se siga extendiendo, porque lo cierto es que la enfermedad es contagiosa a partir del momento en que los primeros síntomas se hacen notar. A este término se le llama “generación”.
Por eso, debemos tener en cuenta que, si bien el ébola no es tan contagioso, sus efectos sobre la salud son bastante graves. Pero, por sobre todo, que el gran papel para evitar un desastre lo deben jugar los sistemas de salud de los países con casos de infectados.








