¡Dormir sola no es tan malo después de todo!

Tu cama se siente fría: cada vez que te acuestas a soñar, la realidad te golpea y te encuentras radicalmente sola. “¡Enhorabuena!”, te diría la ciencia, “Es probable que duermas muchísimo mejor”.

La soledad y el sueño

Parece ser que, a la hora de dormir, la soledad no es tan terrible como la gente cree. Una investigación reciente ha demostrado que compartir la cama con alguien duplica los riesgos de experimentar molestias nocturnas. En este sentido, es posible que te conviertas en víctima de ronquidos o falta de espacio, solo para mencionar dos. A la luz de estos datos, no es de extrañarse que en una encuesta el 26% de las personas haya afirmado dormir mejor, cuando descansan solas.

Nosotras, las mayores víctimas

Otro estudio del 2007 comprobó que las mujeres somos las más afectadas. La investigación consistió en lo siguiente: a un grupo de parejas se les solicitó que durmieran 10 noches juntos y 10 noches separados, mientras se les monitoreaban sus patrones de sueño. ¿El resultado? Las mujeres experimentaron más dificultades para conciliar el sueño y durmieron peor.

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¡Ya lo ves! Todo esconde un lado luminoso, incluso la SOLedad.