¿Estás luchando para deshacerte de algunos kilos? ¿Pero la báscula sigue sin moverse a pesar de todos tus esfuerzos? Estos malos hábitos podrían ser la causa:
Descubre 7 hábitos que sabotean tu objetivo de perder peso

#7 Te saltas el desayuno
Omitir la comida más importante del día engaña al cuerpo, lo que lleva a almacenar todos los alimentos disponibles en forma de grasa.
#6 No contar las calorías líquidas
Las bebidas azucaradas y dulces, incluso las supuestamente saludables, contienen más calorías que la mayoría de los alimentos. No se sienten pesadas y por lo tanto son fáciles de pasar por alto.
#5 No comer lo suficiente
Sí, no comer lo suficiente puede ralentizar tu pérdida de peso. Comer snacks pequeños con frecuencia durante el día mantiene el metabolismo activo y estimulante. Entre menos comas, más lento será tu metabolismo, y más lenta será la pérdida de peso.

#4 Quedarse con hambre
Las personas hambrientas son más propensas a engañar a las dietas y comer compulsivamente. Mantén tu estómago lleno y feliz con snacks saludables y no comas en exceso.
#3 Olvidar que los carbohidratos son el enemigo
Los carbohidratos son el principal culpable de evitar la pérdida de peso. Lo creas o no, son peores que las grasas. Particularmente los carbohidratos procesados como el arroz blanco, la pasta y el pan. Ten esto fuera de la vista, fuera de la mente y fuera de tu estómago, para que la pérdida de peso sea efectiva.
#2 Sustituir las frutas por jugos
Las frutas son saludables, están llenas de fibra, vitaminas y nutrientes. Los jugos son sólo azúcar y agua, en particular los envasados. No caigas en la trampa de pensar que ese vaso de jugo es una alternativa saludable a un refresco. Es casi igual de malo. Las frutas enteras son una apuesta mejor.

#1 Comer sin sentido
Come solo cuando tengas hambre, no cuando estés aburrido, triste, feliz o cansado. La comida no es la respuesta a todo. La costumbre de comer sin sentido es común, pero añade calorías a tu dieta y pulgadas a tu cintura. Evítalo.
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