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¿Cuáles son las problemáticas asociadas a la diabetes de tipo 1?

La diabetes es una enfermedad crónica; esto significa que una vez que se la desarrolla, no hay vuelta atrás, salvo por la diabetes gestacional que sí puede desaparecer luego del parto.

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¿Qué supone esta condición crónica, entonces? La diabetes implica un alto nivel de azúcar (glucosa) en la sangre.

En concreto, la diabetes tipo 1 puede ocurrir a cualquier edad, aunque es más común en niños, adolescentes o adultos jóvenes e implica que nuestro cuerpo produce poca o ninguna insulina.

Sin suficiente insulina, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo en lugar de entrar en las células. Como consecuencia, el cuerpo no puede de usar la glucosa para obtener energía y pueden aparecer las siguientes problemáticas.

Problemas cardíacos y accidentes cerebrovasculares

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Los niveles prolongados y mal controlados de glucosa en la sangre aumentan la probabilidad de desarrollar aterosclerosis, lo que afecta el suministro de sangre al corazón y causa angina (un dolor sordo, pesado o apretado en el pecho).

También aumenta la probabilidad de que un vaso sanguíneo en el corazón o cerebro se bloquee completamente y ocasione un ataque al corazón o un derrame cerebral.

Daños en los nervios

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Los altos niveles de glucosa en la sangre pueden dañar los vasos sanguíneos de los nervios, produciendo un hormigueo o dolor ardiente que se extiende desde los dedos de las manos y los dedos de los pies por las extremidades.

Retinopatía diabética

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¿En qué consiste este problema? Se presenta cuando la retina, la capa sensible a la luz del tejido ubicada la parte posterior del ojo, se daña. La retina necesita un suministro constante de sangre, pero con el tiempo un nivel alto de azúcar en la sangre puede dañar sus vasos sanguíneos y afectar la visión.

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Úlceras en los pies

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El daño en los nervios de los pies puede manifestarse como pequeños cortes que ni se notan, pero si esta problemática es combinada con la mala circulación puede conducir a una úlcera de pie o incluso a una infección grave.

Abortos espontáneos

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Si el nivel de azúcar en sangre no es controlado adecuadamente en una mujer embarazada puede provocar abortos espontáneos, muerte fetal o defectos congénitos graves en el bebé.

Estar atentos a nuestro cuerpo, interpretar sus síntomas, llevar una vida saludable sin olvidar la importancia del ejercicio físico, realizar los chequeos médicos de rutina y consultar a nuestro médico siempre que tengamos dudas es fundamental para cuidar nuestra salud y evitar que la diabetes o cualquier otra enfermedad nos gane la partida. ¡No lo olvidemos!

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