La piel grasa es propensa a brotes de acné debido a la secreción excesiva de aceite de las glándulas sebáceas. La buena noticia es que este tipo de piel es generalmente más lenta en mostrar las arrugas y la decoloración.
Consejos para la piel grasa

La desventaja es que se dan brotes más frecuentes, poros dilatados y un aspecto graso. Los siguientes pasos pueden reducir al mínimo los efectos negativos así que presta mucha atención.
a) Hacer una pasta de manzana y aplicar en toda la cara y el cuello. Deja durante 20 minutos y luego lavar con agua tibia. Esto ayudará a suavizar e hidratar la piel grasa.
b) Sándalo en polvo: añadir unas cuantas gotas de agua a la mitad de una cucharada del polvo. Aplicar la pasta en toda la cara, el cuello (en dirección hacia arriba y hacia afuera) y las manos. Evita el área de los ojos y deja que se seque, luego lavar con agua tibia. Esto reduce las arrugas y lucha contra el acné y manchas.
c) Hacer una pasta con jugo de limón, harina y cúrcuma en polvo (el Yogur natural se puede utilizar en lugar del jugo de limón). Aplicar en toda la cara excepto los ojos. Dejar secar y enjuagar (el jugo de limón puede causar una sensación de hormigueo). Sentirás una piel fresca y libre de aceite.
d) Aceite de germen de trigo: date masajes en la cara con el aceite y deja actuar durante una hora antes de lavarte con agua tibia. La vitamina E es un antioxidante de gran alcance, previene el daño de la piel causada por los rayos UV y la contaminación del medio ambiente. Es ideal para suavizar la piel.
e) La leche es especialmente necesaria para las personas con piel grasa que atrae la suciedad del ambiente y obstruye los poros. Los poros obstruidos significan un aumento de la secreción de aceite.
La leche es un producto de limpieza excelente es por ello que debes lavar la cara varias veces al día con leche para que los poros no se obstruyan. Es muy importante que te laves la cara antes de irte a la cama por la noche ya que los residuos del maquillaje pueden ser los peores enemigos de la piel. Mezclar 2-3 gotas de sándalo o aceite de lavanda con 2 cucharadas de leche y dar un suave masaje por todo el rostro.
f) Miel: hidratar la piel es esencial, ya que pierde rápidamente humedades naturales de la piel por lo que se pone áspera e irritada. La piel seca necesita mucha hidratación pero la piel grasa también la necesita. Una piel hidratada regularmente tiene menos líneas de expresión, una textura suave, menos descamación superficial e irradia un brillo saludable.
La miel es un humectante natural excelente. Aplicar una fina capa de miel en toda la cara y luego lavar con agua tibia después de 15 minutos.
Esperamos que estos pequeños consejos te sirvan para mantener tu piel linda, fresca y joven!








