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Cómo sentirte vital durante todo el día

Tu celular no es el único que necesita recargar baterías. A medida que pasan las horas, los párpados se te hacen más pesados y tus movimientos más torpes. En el momento menos esperado, te vas a apagar –pero, ¡las obligaciones de tu agenda se seguirán multiplicando!–. Te preguntas, "¿qué recórcholis puedo hacer?". Nosotras te contestamos: poner en práctica estos consejos para sentirte vital.

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#5 Buen descanso

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Por lo menos, descansa entre siete y nueve horas para evitar arrastrar los pies al día siguiente. Eso sí, no fuerces el sueño; acuéstate solo cuando te sientas somnolienta. Esto te concederá infinitos beneficios; en este sentido, un buen descanso te permitirá reducir el estrés y prevenir la depresión. Asimismo, te ayudará a mejorar la concentración, potenciar la resistencia física y acelerar el funcionamiento del metabolismo.

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#4 Cena leve

Diversos estudios han revelado que, por cuestiones de tiempo, la mayoría de las personas comen poco durante el día y se sobrecargan de alimentos en las noches. Este hábito representa un gran atentado contra el buen descanso, así que trata de cenar algo liviano, entre dos y tres horas antes de acostarte. De este modo, tu cuerpo dispondrá del tiempo necesario para digerir bien los alimentos y a la hora de dormir, estará en las mejores condiciones para descansar

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#3 Rutina

Para espantar a cierta gente, a veces basta con pronunciar la palabra "rutina". Y es que esta ha adquirido cargas semánticas bastante negativas y es frecuentemente asociada con el aburrimiento y la monotonía. Sin embargo, cuando de un buen descanso se trata, la rutina es necesaria.  Así que no titubees en apegarte a una rutina de sueño. Acuéstate y levántate siempre a horas similares –incluso los fines de semana–. Esta representa la mejor estrategia para prevenir el estrés y preservar un caudal de energía constante durante todo el día. 

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#2 Relajación

No hagas locuras antes de acostarte –resérvalas para cualquier otro momento del día–. Opta por actividades que promuevan la relajación como leer, beber un vaso de leche tibia o tomar un baño caliente. Por otro lado, acondiciona tu entorno para que se convierta en un inductor del sueño. Para ello, instala una luz tenue y procura que el ambiente esté siempre fresco –ni muy frío, ni muy caliente–. 

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#1 Agua

Consumir mucha agua durante el día también es muy importante. Esto se debe a que un cuerpo deshidratado gasta la energía de un modo mucho menos eficiente que uno hidratado. Eso sí, no tomes mucho líquido antes de acostarte. Si lo haces, no te quedará más remedio que abandonar tus sueños para visitar al baño.

Estos son nuestros consejos para que permanezcas vital y enérgica durante todo el día. Ponlos en práctica y podrás, al fin, descansar como un verdadero angelito. ¡Que tengas dulces sueños!

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