Cómo eliminar las verrugas periungueales

Las  verrugas periungueales son aquellas que se desarrollan debajo y alrededor de las uñas de los pies o de las manos. En general, comienzan teniendo un tamaño insignificante y luego crecen, hasta poseer las dimensiones de un guisante. Una vez que aparecen, es fundamental tratarlas. ¿Te gustaría saber cómo eliminar las verrugas periungueales? En esta entrega, te lo contaremos.

Causas de las verrugas periungueales

Antes de ahondar en el tratamiento de las verrugas periungueales, te mostraremos cuál es su causa. Las verrugas en general son causadas por el virus del papiloma humano. 

Este es sumamente contagioso; puede pasar de una persona a otra incluso de forma indirecta, por tocar una toalla o cualquier otro objeto utilizado por alguien portador del virus. 

Si posees el virus, ten cuidado, porque puedes esparcirlo por otras partes de tu cuerpo. Por eso, mantén tus dedos limpios y evita a toda costa comerte las uñas.

Tratamiento para las verrugas periungueales

En algunos casos las verrugas se irán por sí solas y no exigirán ningún tratamiento. Ahora bien, si su crecimiento es doloroso o antiestético, es posible tomar algunas medidas.

1. "Sofoca" la verruga con cinta adhesiva durante 6 días. Asegúrate de cambiar la cinta a diario. Descansa al séptimo día y, si es necesario, vuelve a repetir el proceso. 
2. Si el problema persiste, consulta a tu médico. La crioterapia o algún "método de quemado" (como lásers de dióxido de carbono o agujas eléctricas) pueden utilizarse para atacar la zona infectada y estimular la caída de la verruga. 

Prevención de las verrugas periungueales

"Más vale prevenir que curar"; no dejes que las verrugas periungueales afecten tus dedos. Para eso, mantén tus uñas limpias y córtalas con forma cuadrada. No te quites las cutículas, pues estas impiden que entre agua a tus uñas y que se cree el ambiente ideal para la proliferación de bacterias. Córtate las uñas a menudo y ante el menor signo de infección o cambios en las uñas, consulta a tu dermatólogo.

Si ya es demasiado tarde para estas medidas de prevención, libérate de las verrugas periungueales y vuelve a lucir tus manos y pies con total tranquilidad. No permitas que esos globitos despreciables te roben la tranquilidad. ¡Es simple!