¿Cómo curar el herpes Zoster?

El herpes Zoster, popularmente conocido como zona, es una erupción cutánea que se manifiesta con vesículas o ampollas muy dolorosas. Están causadas por el mismo virus de la varicela (varicela-zoster). Las ampollas que aparecen siguen normalmente el recorrido del nervio sobre el cuerpo afectado por el virus; entre los síntomas más visibles encontramos: un intenso dolor, picores y quemazón sobre la zona infectada, así como un estado de malestar general. Es fundamental tratar la infección en cuanto aparecen los primeros síntomas para evitar que se agrave.

A pesar de que en un primer tiempo el paciente no resiente más que un malestar general y presenta un poco de fiebre, algunos días después, el herpes Zoster se manifiesta en el cuerpo y aparecen ampolla sobre un costado del cuerpo, normalmente en la zona torácica o lumbar, agrupándose en una especie de línea.

La erupción cutánea del herpes Zoster es bastante característica, razón por la cual el diagnóstico médico es relativamente simple. Examinando la erupción, el médico puede determinar de qué se trata, y recomendar el tratamiento más apropiado a cada caso. En raras ocasiones, es necesario hacer análisis. Estos consisten en tomar una muestra de piel para analizar en laboratorio e identificar si se trata realmente del virus de la varicela-zoster.

Sabiendo que el virus del herpes Zoster no puede ser eliminado del organismo más que a través de un tratamiento específico, aunque se aconseja que el médico prescriba ciertos medicamentos para aliviar y reducir los síntomas de la infección. De esta forma, la recuperación será más rápido y mucho menos dolorosa.

Nomalmente, para aliviar el herpes Zoster, el médico puede prescribir un antiviral, un medicamento eficaz para combatir el virus, aliviar los dolores propios de la infección, evitar que esta se agrave y reducir el período de recuperación. Los medicamentos antivirales más frecuentes para curar el zona son: aciclovir, famciclovir y valaciclovir. Se trata de medicamentos en comprimidos que se deben tomar por vía oral.

En casos muy específicos, como por ejemplo si el paciente está afectado por el VIH y un sistema inmunitario debilitado, estos medicamentos antivirales pueden que no sean eficaces. Por esta razón, es probable que sea necesario administrar el medicamento por vía intravenosa y el paciente requiere una hospitalización.

Existen medicamentos antiinflamatorios bastante fuertes llamados corticoides que pueden ser prescritos por un médico y que actúan para reducir la inflamación, aliviar el dolor que provocan las ampollas y acelerar la curación del herpes Zoster.

Los otros medicamentos que el médico puede recomendar para tratar el herpes Zoster son los analgésicos para calmar el dolor, los antihistamínico para reducir el picor o una crema específica indicada para reducir el riesgo de sufrir neuralgias post herpéticas, un dolor permanente o intermitente que permanece en la zona afectada, a pesar de que la infección haya desaparecido.

Además de los medicamentos, es importante limpiar bien las ampollas, así como la zona de alrededor, y mantenerlas secas y limpias, sin aplicar cremas, ni productos cosméticos en la zona de la infección y evitar llevar ropa demasiado ajustada.

Más información: Sante