Una de las partes más importantes de tu cuerpo son los pies, son ellos los que te sostienen, los que te permiten caminar y los que te llevan a esos lugares de éxito que tanto has buscado. A pesar de ello, no siempre llevas a cabo una rutina para cuidar los pies, ni luego de correr o de caminar por largas jornadas.
Cómo cuidar los pies


Por ello, hoy te daremos algunos trucos sobre cómo cuidar los píes. Esperamos que mediante estos consejos llegues lejos con un par de pies sanos.
La importancia de cuidar los pies

El cuidado de los pies no es solo un asunto de vanidad. Así como gastas horas tratando de arreglar tu pelo, o esperando un turno por el manicure, deberías tomarte un tiempo para el cuidado de los pies ya que te dará muchas ventajas en términos de salud, que, a largo plazo, tu cuerpo agradecerá.
Aunque no lo creas, existe una rama de la medicina que se encarga del la salud de los pies: esta responde al nombre de podología. Expertos en este campo se dedican a diagnosticar y tratar enfermedades de los pies. Seguramente, si sigues las recomendaciones que te daremos más adelante, no tendrás que visitar a este especialista. Veamos, entonces, cómo cuidar la salud de los pies.
Lávate lo pies todos los días
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La higiene es un asunto de vital importancia. Lavarse los pies todos los días implica menor riesgo de infecciones, incluso de mal olor. Procura secar bien tus pies después del lavado y utiliza talco que te ayudará a disminuir la sudoración y sentirte más cómodo, si es que hoy tienes quitarte las medias en algún momento del día. Adicionalmente puedes utilizar algunas cremas para pies que actualmente ofrece el mercado, ellas hidratarán la piel de tus talones que, por su constante uso, a veces se vuelve muy dura.
Mantenimiento de los pies

Es muy importante el mantenimiento de la salud de tus pies. Para ello, debes cortar tus uñas regularmente. Córtalas de manera recta y cuadrada y así evitarás las uñas encarnadas y otras molestias. Asimismo, debes evitar compartir tus herramientas de aseo.
Usar un buen calzado

Es cierto que esos zapatos de tacón alto se ven divinos en el mostrador, pero ten en cuenta que puestos no lleguen a dañar tus pies. Tienes que fijarte en la talla y la horma precisas para ti. Algunos dicen que todos tenemos un pie más grande que el otro, entonces intenta comprar tus zapatos con la medida de tu pie más grande. De otra parte, es vital utilizar materiales suaves, flexibles y buena calidad en tus zapatos y medias. Tus pies también transpiran y ellos como tú no querrán sentirse ahogados.
Prevenir es curar

No se equivocan cuando dicen que prevenir es curar. Por ejemplo, cuando vayas de vacaciones a la playa o a la piscina, intenta no caminar descalzo, ponte algún calzado acorde al clima, que te proteja, y así evitarás infecciones y problemas tan molestos, como, por ejemplo, el pie de atleta.
Finalmente, si logras cuidados tan simples como estos, que hasta parecen triviales, seguramente no visitarás al podólogo. Sin embargo, si sientes algún tipo de dolencia en tus pies, lo más recomendable es que visites a tu médico. Puede pasar que los problemas en tus pies sean síntomas de enfermedades como la diabetes, la artritis o la mala circulación y que lo estés manejando como un problema menor.
¿Le prestas atención al cuidado de los pies? ¿Qué tipo de rutina llevas para ello?








