Artes marciales: grandes beneficios para los más pequeños

A diferencia de lo que se cree, llevar a tus hijos a clases de artes marciales va a moderar su carácter en vez de promover la violencia.

Actividades como el t ae kwon do, kung fu y aikido son muy divertidas para los más chicos, éstas son elegidas por varones y niñas sin distinción. Algunos padres creen que este tipo de actividades promueve la violencia, pero eso es sólo un mito.

En realidad las artes marciales ayudan al desarrollo de la auto disciplina por parte de los chicos, y también ayuda al desarrollo de sus habilidades para relacionarse con otras personas.

De hecho muchos padres cuyos hijos tienen dificultades de concentración o hiperactividad estimulan a sus hijos a asistir a clases de artes marciales ya que los ayuda a controlar la energía y mantener la concentración.

Un clase típica de artes marciales comienza saludando al maestro. Luego de un calentamiento los estudiantes comienzan a practicar las distintas disciplinas, y esto puede ser aprender a dar patadas, golpes o bloqueos, actividades que requieren de mucha atención y concentración para ser practicadas correctamente.

El progreso en las artes marciales se puede ver a través del sistema de cinturones, lo que funciona como un excelente sistema de objetivos para el niño.

A los 6 años de edad los chicos ya están listos para comenzar a practicar artes marciales. A esa edad ya han desarrollado una suficiente capacidad muscular y pueden controlar los golpes y giros en forma apropiada.