Dicen que la mente es selectiva y que en nuestro recuerdo prevalecen siempre los souvenirs más cálidos y agradables de nuestra infancia. Sin embargo, y guiándonos por el hecho de que cada persona es un mundo, la mayoría sucumbimos a la nostalgia al recordar estos episodios tan dulces como, a veces, incluso amargos.
7 momentos nostálgicos de nuestra infancia que difícilmente podamos olvidar

1. Las tardes de dibujos animados

Para los que aún no conocíamos las tablets y sus muchos videojuegos y nos criamos en los 80 y 90, las películas Disney constituyen nuestro particular referente de ocio de esos años en los que nos sentábamos frente al televisor hasta ver 3 o 4 veces en un mismo día películas como Blancanieves, Bambi, 101 Dálmatas, La Sirenita o Aladdín. Y en VHS, por supuesto.
- Podría interesarte: 8 películas Disney cuyas verdaderas historias podrían arruinar tu infancia
2. Las historias de nuestros abuelos

En el mundo existen abuelos para todos los gustos: más amargos, otros dignos de un spot publicitario de caramelos, pero hay algo que todos tienen en común: su afán por transmitir viejas historias.
Junto a un fuego, en torno a una mesa repleta de comida o durante una escapada rural, todos recordamos aquellas historias de guerras, pueblos y conquistas de nuestros mayores con una sonrisa.
3. El primer viaje

Salir de nuestra zona de confort cuando hemos alcanzado la edad adulta parece algo más fácil (o no, depende), pero cuando éramos pequeños el hecho de ser más ignorantes y vivir en un mundo pequeño y limitado se compensaba con ese primer viaje que ampliaba nuestra visión y disfrutábamos incluso más que nuestros padres. Ganan las escapadas de verano a playas en las que podíamos pegarnos horas construyendo castillos o un parque al que estamos deseando regresar.
4. Venir solo a casa del colegio

Y fue sin esperarlo, pura magia como atarnos los cordones o aprender a leer, otros momentos de aprendizaje que se quedaron grabados en nuestra mente.
5. La mañana del 25 de diciembre

La época navideña continúa siendo la fecha insignia de unos peques que aguardan durante todo el año para escribir sus deseos y caprichos a un Papá Noel que no sabíamos cómo conseguía sacar tiempo para entrar en casa y comerse nuestras gallegas. Describir la mañana del 25 de diciembre continúa siendo una sensación casi indescriptible a pesar de los años.
6. El día en que marcaste un gol

Solo para chicos a los que el fútbol no se les daba bien y marcar su primer gol supuso ser visto con otros ojos por sus compañeros de clase.
7. Algún mal momento

Los buenos momentos siempre prevalecen sobre los malos aun si a veces no podemos evitar recordar aquellos momentos oscuros de una infancia en la que sucesos inofensivos para los mayores suponían todo un mundo para nosotros: el retraso de nuestro padre al llegar a casa, el hecho de saber que tocaba comer judías hervidas, un grito y castigo de nuestra madre o sí, ciertos conflictos de los adultos que, aún sin saberlo, nos cambiarían para siempre.
- Podría interesarte: 7 curiosos datos que arruinarán tu infancia
Estos 7 episodios de nuestra infancia yacen en nuestra memoria para recordarnos quienes somos y cuánto hemos cambiado. ¿Cuál es el momento que más recuerda de tu infancia?








