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5 tips para hacer el yogur helado más saludable

Se suele pensar que el yogur helado es poco saludable y que por lo tanto, para mantener la salud y la figura, hay que dejarlo de lado y privarse de uno de los postres más deliciosos que aporta el verano. Pero esto no tiene por qué ser así. Basta con hacer algunos cambios fundamentales para poder disfrutar de un plato rico y delicioso al menos dos veces en semana.

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La moderación es esencial cuando se sigue un plan de alimentación saludable. Hoy presentamos diversas maneras de hacer más saludable el yogur helado para no tener que privarse de él.

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1. Mantener su sabor original

Una de las mejores maneras de hacer más saludable el yogur helado es hacerlo de la manera más sencilla. Normalmente, la gente se suele decantar por otro tipo de sabores, fuera del gusto natural del yogur. Por eso suelen añadir grasas extra y azúcar de más. No obstante, el yogur natural tiene otras muchas ventajas saludables que conviene conservar si no queremos privarnos de un postre rico y sano a la vez.

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2. Añadir fruta fresca

La fruta fresca es una de las mejores opciones para yogur helado. Entre las fresas, los arándanos, los kiwis y los mangos existe una gran variedad. La fruta es rica en vitaminas, minerales, antioxidantes, y en otras muchas propiedades.

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3. Reducir los dulces

El yogur helado es una alternativa mucho más saludable que los helados. Sin embargo, la etiqueta "sin grasa" o "bajo en grasas" hace que mucha gente se atreva a añadir un montón de ingredientes poco saludables como galletas y trozos de pastel. Sin grasa no significa que no tenga calorías.

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4. Evitar el barquillo

El barquillo en forma de cono es muy atractivo a la hora de tomar un yogur helado. Sin embargo, lo que de sano y natural puede tener el helado, se rompe con la ingesta de esta galleta tan sabrosa, normalmente fabricada con azúcares y grasas que dan sabor y hacen que el conjunto sea más delicioso. Dicho de otra forma, el cono del helado puede suponer entre 50 y 150 calorías más que de golpe se le añaden a un postre que en sí mismo puede resultar nutritivo y saludable.

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5. Escoger el tamaño más pequeño

En comparación con un cono gigante, una taza puede ser un plan mucho más saludable. En cualquier caso, hay que tener en cuenta el tamaño de la taza que se elija. Siempre conviene elegir la copa más pequeña, puesto que si bien es cierto que las virtudes saludables del yogur helado son enormes, no por ello se trata de un postre libre de grasas y calorías.

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En resumen, si seguimos estos consejos tan sencillos a la hora de tomar yogur helado, podemos permitirnos el lujo de comerlo varias veces por semana sin tener que privarnos de un postre que es todo un placer, especialmente en verano.

Ver también: 6 mitos del yogur griego