Siempre nos han dicho que tenemos que poner lo mejor de nosotros en todo lo que hagamos, pero lo cierto es que no siempre es necesario.
5 momentos de tu vida que no necesitan que des todo de ti

La vida no está cronometrada, sin embargo nosotros nos empeñamos porque así sea y es por eso que corremos detrás de objetivos superficiales que no siempre nos ayudan en la vida.
Estas son las situaciones que no merecen todo tu potencial:
1. Graduarte

Todos sabemos lo importante que es la escuela en la vida, de hecho es la responsable de abrirnos muchas puertas en el futuro. Sin embargo, no debes correr detrás de tu graduación, de esa forma no disfrutarás esa etapa ni aprenderás nada verdaderamente.
Todos tenemos nuestros tiempos, a veces necesitamos un año más que los demás para poder terminar el secundario de buena forma. ¡No te apresures, nadie está corriendo detrás de ti!
2. Llevar una vida saludable
Sin salud no hay nada, pero sobrepasarse con el cuidado del cuerpo no es para nada divertido.
Parte de disfrutar de la vida es darse algunos gustos, así que tómate un día libre, disfruta de una rica comida. No te sientas culpable por no ir al gimnasio algún día. Ser saludable también es ser feliz, no te atores con obligaciones extremas, disfruta de cada momento.
3. Cómo te ves en redes sociales

Como todo millennial seguramente tengas alguna selfie <
La verdad es que deberías dejar de hacer eso, es muy difícil ser ese tú perfecto de la foto, ¿no es mejor ser tú mismo? Quizás eso haga más liviana tu vida en la que pretendes ser algo que no eres.
4. Dar el mejor regalo o la mejor fiesta
No te esmeres tanto por darle el mejor regalo de cumpleaños a tu amigo o familiar, tampoco te estreses por dar la mejor fiesta. Hay algunos detalles que no son importantes, lo que sí es importante es el amor y la dedicación que le pongas a lo que haces.
La persona que quieres recordará los momentos compartidos, no las cosas materiales.
5. Ser consciente

En el mundo de información constante parece que es necesario saber acerca de todo lo que sucede y comentarlo constantemente. Sin embargo, si pasas horas de tu día leyendo noticias e indignándote por las miserias del mundo, olvidarás de las cosas bonitas que aún existen.
Espera un poco, deja de leer compulsivamente cosas que lastiman tu corazón. Mira los pequeños detalles o recuerda aquellas anécdotas que nos hacen decir ¡sí que vale la pena estar vivo!
No siempre tenemos que dar lo mejor o hacer lo mejor, a veces simplemente con formar parte es suficiente. Deja de hacer lo que los demás esperan, relájate y vive tu vida, cuando comiences a hacerlo verás que es mucho más sencilla de lo que parecía.








