Comprar ropa puede ser un paseo estimulante para algunos (siempre hay algún raro), pero para la mayoría de nosotros es simplemente una tortura que se vuelve necesaria cuando cambia la estación y ya no tenemos nada más que ponernos. Las ocasiones donde las estrellas se alinean y encontramos lo que queremos, en poco tiempo y sin pagar fortunas... son escasas. Milagrosas. Es más probable que se presenten estos 11 incómodos y "dolorosos" momentos que te harán cuestionar si realmente necesitas nuevos pantalones.
11 cosas que a todos nos pasan cuando vamos a comprar ropa

- Mejor dicho "¡auxilio!": ¡Aleluya! Estas 3 tiendas de ropa se instalan en Argentina... finalmente
1. Nada me queda, tendría que haber adelgazado antes de venir aquí. Estos no son talles de gente normal.

Y mientras intentas que algo te quede, las luces de los probadores NUNCA te hacen ver bien.
- Meditemos sobre esto: 10 cosas que necesitas decirle a alguien que se pone insoportable con cuidar su figura
2. Odio las tiendas, ¿esto no se puede comprar por Internet?
Son lugares áridos y hostiles que te hacen sentir solo e indefenso. Miau. Quiero irme.
- ¿Piensas que estamos exagerando? Tú lo pediste: ¿Black Friday o apocalipsis zombie? 11 aterradoramente ciertas similitudes
3. Vendedora: ALÉJESE, SOLO ESTOY MIRANDO
Y llegamos finalmente a estos agentes del demonio. EL TERROR IRREMEDIABLE DE LA TIENDA DE ROPA. Cuanto más se esfuerzan en hacer su trabajo, más quieres que desaparezcan. Y cuando realmente los necesitas, no están. Y te juzgan. ELLOS TE JUZGAN.
4. No entiendo cómo funciona esto, ¿voy y me lo pruebo? ¿Por qué la vendedora me mira tanto?

Es todo cuestión de manejar las distancias pero... siempre te miran. ¿Sientes esos ojos posados en ti?
5. Esta ropa me encanta pero no la usaría jamás.

No me animo, no me animo, quizás sea mejor que no me anime, ¿no?
6. ¿Esta ropa es de mujer... no? ¿Y si pruebo en el sector de niños?

Estoy desesperado. Y la vendedora me juzga.
7. Sal de aquí, maldita vendedora NO NECESITO TU AYUDA.

No necesito tu opinión sobre si me queda "bien" o "mal". Ouch.
8. Eso nunca va a estirarse. Es un engaño. No te creo nada, vendedora MENTIROSA.

"Ni bien lo empieces a usar se va a ajustar a tu cuerpo". MENTIROSA. ESTOY GORDÍSIMO.
- Mientras sonríes: 10 situaciones en las que mentir puede ser tu mejor opción
9. ¿Por qué nadie me ayuda? ¿Por qué me siento tan solo?
Quizás fue por todo el desprecio hacia las vendedoras.
10. ¿¡ESE PRECIO!? ¿¿¿¿EH????
¿Esto está hecho de fibras de oro? Creo que simplemente voy a tomar mis jeans viejos y una tijera...
11. No estoy decidido, mejor no compro nada. Voy a seguir mirando.

Adiós, vendedora, te voy a extrañar. Llámame. Posdata: te dejé toda la tienda desordenada y ahora tienes que doblar todo de nuevo. ¿Perdoncito?
Y luego sales de esa tienda, y encuentras justo lo que necesitabas en la mitad de tiempo y sin pensarlo demasiado.
¿Te gusta comprar ropa? ¿Tienes algún tip para nosotros?

