El invierno hace estragos en la piel si no es cuidada como es debido. Pero para tengas tu cutis en perfectas condiciones, no es cuestión de aplicarte cuanta crema o loción se te ocurra, sino que es necesario saber qué tipo de producto o tratamiento le sienta mejor.
Tratamientos spa según el tipo de piel

Ir a un spa es lo ideal, donde serás atendida por especialistas en belleza y cuidado de la piel. Pero si no tienes esta oportunidad, te pasamos los distintos tratamientos spa según el tipo de piel.
¡Y a lucirse!

La piel seca
Este tipo de piel suele ser más difícil de tratar debido a que carece de lípidos y aceites naturales. Como es propensa a la deshidratación, este cutis necesita tratamientos especiales: la falta de agua hace que el ciclo natural de exfoliación de la piel sea más lento.
Los tratamientos faciales incluyen exfoliaciones suaves y aceites con agua para equilibrarlo. Por último, las mascarillas ayudarán a los productos a penetrar en la piel. En este caso, son mejores las mascarillas que se engoman o endurecen: cualquier producto que se haya colocado debajo de ella, hará mayor efecto, dejando la piel hidratada y fresca.

La piel grasa
La piel grasa produce más aceites de los que realmente necesita. El maquillaje, las células muertas o la contaminación misma pueden obturar los poros de la piel, llegando a endurecerse con el tiempo.
Los tratamientos para este tipo de piel recomendados son a base de exfoliantes faciales que incluyen algún químico como el ácido glicólico o salicílico, que penetra en los poros y funde la congestión.

La piel mixta
La piel mixta posee zonas grasas y otras secas, por lo que los distintos tipos de piel de un mismo rostro deben ser tratadas por separado. En estos casos, puedes buscar un exfoliante de microdermoabrasión enzimática o química, a fin de brindar a tu piel un brillo más equilibrado.
Por supuesto que debe complementarse con eliminación de congestión en la zona “T” y una máscara con tratamiento profesional e hidratación para suavizar el resto del cutis.

La piel madura
Una piel madura puede ser muy distinta a otra. Pueden ser grasa, propensa al acné, seca y deshidratada y hasta mixta. Pero su particularidad es la circulación y las células muertas.
Lo principal es tratarla según el tipo de piel: si es grasa, seca o mixta. Luego, concentrarse en los tratamientos que aumenten la circulación y brinden antioxidantes, vitaminas y minerales, y rejuvenecer la piel.
Aprovecha estos consejos básicos para el tratamiento de tu piel. Lee sobre cuál es tu tipo de piel, y toma nota de los seis pasos para una piel perfecta en tu rostro.









