Mascarillas caseras: cómo cuidar tu piel sin ponerse en gastos (I)

El cuidado de la piel del rostro es una de las tareas más imprescindibles para toda mujer, puesto que es lo que se dice “nuestra carta de presentación”. Es cierto que muchas veces no tenemos tiempo y menos aún dinero para comprar mascarillas y muchos menos para ir a un spa a que especialistas se ocupen de ello.

Es por ello que voy a dejarle una serie de recetas para hacer mascarillas caseras, que cumplen la misma función que las que puedes comprar pero son 100% natural y tu bolsillo lo va a agradecer.

Antes que nada debes de tener en cuenta que previo a cada aplicación deberás realizar una limpieza profunda de tu rostro con una crema limpiadora o con algún tónico. Una vez tu piel esté limpia de toda impureza y suciedad llega el momento de aplicar la mascarilla. Te dejaré varias “recetas” entre las que podrás elegir de acuerdo a la necesidad que presente tu piel.

Mascarrilla suavizante
Es ideal para aquellas pieles ásperas y rugosas. El truco está en batir nata hasta espesarla y mezclarla con una cucharadita de miel. Una vez que la apliques por tu rostro déjala actuar durante 20 minutos. Los componentes de la nata nutrirán a tu piel dándole más suavidad.

Mascarilla antiarrugas
Es bueno comenzar a aplicarla apenas empieces a notar alguna pequeña arruga, puesto que la idea es que se detenga la producción de arrugas y no intentar que desaparezcan una vez que ya cubrieron tu rostro. Para hidratar tu piel deberás triturar media palta o aguacate (como prefieras llamarla) y mezclarla con una cucharada de jugo de limón, y dos cucharadas de jugo de zanahoria. Por último añádele una cucharada de nata. No le hagas asco al resultado, úntalo en tu rostro y espera 20 minutos, ya le agradecerás luego cuando veas los resultados.

Mascarilla nutritiva
Esta receta es ideal para pieles secas. Para darle los nutrientes que le están haciendo falta los componentes serán: una cucharadita de miel, una de harina, una de aceite de oliva y por último una yema de huevo. El huevo tiene muchas proteínas que nutrirán a tu piel. Luego de 30 minutos que actúe sobre tu rostro, límpiala con agua tibia.

En mi siguiente post daré algunas otras recetas, porque aún quedan varios tipos mascarillas para nuevos tipos de piel