Si sientes que tu cabello sigue maltratado a pesar de haber probado todos los productos de reparación e hidratación, es muy probable que sea por el poco cuidado que tienes al lavarlo.
Has estado lavando mal tu cabello todo este tiempo: estos son los 6 errores que cometes
Es sumamente importante que tomes en cuenta varios aspectos durante el proceso de lavado de tu cabello. La temperatura del agua, el shampoo y el cepillado son factores que pueden determinar el largo y el brillo.
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Pero ya no tienes que preocuparte, porque esta lista te ayudará a identificar al menos 6 errores que no debes seguir practicando al lavar tu cabello.
Temperatura del agua
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No te duches con agua muy caliente o al menos procura bajar la temperatura de la regadera unos minutos antes de salir de la ducha. Es más fácil que tu cabello se caiga si el folículo está muy abierto debido al calor, mientras que con el agua fría lo cerrarás por completo.
Mucho shampoo
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Más espuma no siempre significa más limpieza. En el caso de tu cabello, utilizar demasiado shampoo puede provocar resequedad en tu cuero cabelludo. La cantidad adecuada para una melena de corta a mediana es el tamaño de una almendra, y para el cabello largo el tamaño de una nuez es más que suficiente.
Shampoo con agua
No apliques el shampoo directamente en tu cabello. Primero pon la cantidad adecuada en tu mano, mézclalo con un poco de agua y crea algo de espuma para que rinda más.
No te talles con las uñas
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¡No, no y no! Las uñas sólo harán que lastimes tu cuero cabelludo y facilites la aparición de caspa o, peor aún, jalarte el cabello y arrancarlo. Usa las yemas de tus dedos para masajear la cabeza y distribuir bien el shampoo.
Usa acondicionador
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No le eches la culpa al acondicionador sobre la caída de tu cabello, porque este paso en el lavado lo único que hace es hidratar tu melena y darle mayor fuerza. Úsalo con agua fría para disminuir la caída y permite que las hebras absorban los nutrientes del acondicionador por 3 o 4 minutos.
No frotes con la toalla
Si ya seguiste todas estas recomendaciones para evitar dañar tu cabello durante el lavado, no servirían de nada si al salir frotas tu melena con una toalla. ¡No lo frotes! Mejor presiónalo con delicadeza para absorber el exceso de agua y enróllalo en un turbante mientras te arreglas.
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