Consejos para empezar a correr en las mañanas

Muchas veces nos proponemos a empezar a salir a correr en las mañanas, ya sea para bajar de peso, para estar más activos y con más energía o simplemente por realizar alguna actividad deportiva. Bien sabemos también que no es fácil, que lo posponemos constantemente y siempre estamos "el lunes empiezo", y nada.

Justamente para aquéllas mujeres que realmente quieren empezar pero por alguna razón no lo hacen, escribí este post. En él encontrarás algunos tips que te ayudarán a comenzar esa rutina, que una vez que la empieces y te adaptes, la tomarás para siempre. Y creo que todas estamos de acuerdo que es una sana costumbre.

Vete a dormir temprano: no es fácil levantarse temprano si una tiene pocas horas de sueño, entonces para lograrlo, ponte una hora límite y respétala. Así tendrás la energía suficiente para salir a correr y no la pereza.

Deja todo listo: si dejas tu ropa deportiva lista, entonces el tiempo desde que te levantas hasta que sales es mucho menor y podrás dormir unos minutos más. Es un consejo para las más perezosas...

No te distraigas: si te quedas en la cama más de la cuenta pensando en tu día y lo cansada que estás, probablemente no salgas, ya sea porque te quitaste la motivación o porque preferiste quedarte durmiendo.

Busca buena compañía: puedes salir a correr acompañada si lo deseas, a veces es una motivación extra. Pídele a una amiga o a tu chico que vayan contigo. ¡O sal con tu perro! Ellos son siempre buena compañía. Y si prefieres ir sola, busca la compañía de la música o del paisaje por donde corres. Hay personas que saben que si tienen música, ya están listas; y otras que saben que si salen a correr a algún lugar bonito, se distraen y no sienten las presiones del ejercicio.

Recompénsate: la recompensa evidente que tendrás, si mantienes una dieta sana, es la pérdida de peso. Pero como este proceso es lento y necesitamos motivación día a día, puedes recompensarte. ¿Cómo? Con un rico desayuno cuando vuelves (pero sin excesos o no conseguirás la meta final), saliendo de compras, con un baño de burbujas, ¡o como gustes!