Souvenirs portafotos: Arte en casa con Shimi

Bienvenidas a la columna de Diseño rústico.

Hoy les traigo estas maderitas con un espiral de aluminio que son souvenirs para fiestas que cumplen la función de portafotos. Modelé unos pajaritos de cerámica fría y agregué  un poco de musgo seco para simular un nido; coloqué los elementos en una base de Cedro barnizado y sólo falta que cada uno le agregue una pequeña tarjeta de agradecimiento dentro del espiral  para completar un delicado souvenir para cualquier evento.

Me gusta la combinación del color natural del musgo con el blanco del pajarito, la madera y el aluminio; aunque aquí hay lugar para que cada uno aporte sus ideas y sus gustos en los colores y las formas.

Estos souvenirs se prestan para realizar el trabajo en serie cuando tenemos muchos invitados, pues son muy sencillos de hacer y bien podremos armar cien o doscientos sin muchos dolores de cabeza.

Voy a detallarles a continuación el paso a paso para la confección de los Souvenirs portafotos con nidos y pajaritos.

Materiales:

Tacos de madera 45 x 45 x 15 mm
Cerámica fría
Varilla de aluminio de 3 mm
Agujas de pino (para los picos)
Musgo seco
Cúter
Aguja
Pinza chata
Pinza redonda
Martillo
Barniz
Aguarrás
Esmalte sintético colores:
Blanco mate
Amarillo brillante
Rojo brillante
Pinceles

Paso a paso:

Comienza pintando con dos manos de barniz los tacos de madera. En este trabajo he utilizado madera de Cedro, pero puedes elegir cualquier tipo de madera roja o marrón (para que destaquen los pájaros). Deja secar 8 durante horas.

Corta los extremos de las agujas de pino en forma diagonal a 3 o 4 mm. de la punta. El cúter debe estar bien afilado y el corte debe ser limpio, pues debe quedar el extremo puntiagudo para poder insertar la aguja de pino en la cerámica sin dañarla.

Corta también la varilla de aluminio en secciones de 8 cms. aproximadamente.

Utilizando la pinza redonda haz un círculo en la punta. Aprieta el círculo con la pinza chata y ve dando vueltas hasta concluir el espiral. Colócalo sobre una plancha de hierro o sobre una superficie bien dura y golpea con el martillo el extremo redondo del espiral hasta que quede plano.

Amasa la cerámica sosteniéndola con ambas manos y ve girándola mientras la golpeas para quitarle el aire. Deja reposar la masa mientras te lavas las manos. Esto es importante, no solo para el cuidado de tu piel sino también para impedir que la capa de cerámica que queda en las palmas reseque la masa y se resquebraje.

Haz un cilindro de masa y envuélvela en nylon, de donde irás sacando pequeños trozos para ir armando los pajaritos. Este envoltorio debe permanecer cerrado todo el tiempo y alejado del sol.

Modela bolitas de varios tamaños (de 6 a 10 mm.) en tandas de no más de 10, para poder modelar sin que la masa se seque.

Toma cada bolita y hazla rodar por la palma de tu mano para formar un cono. Haz unos más cortos y otros más alargados para los diferentes tipos de pájaros.

Pliega las puntas y forma en algunos de ellos espirales y en otros colas cortas.

Inserta las puntas de las agujas de pino en el lugar del pico y marca con una aguja los ojos a ambos lados de la cara.

Amasa conos de cerámica y encólalos en la base de madera. Coloca unas gotas de cola vinílica en la punta del espiral de aluminio e insértala en la cerámica.

Deja secar hasta que la cerámica haya cambiado su tonalidad y el color sea completamente uniforme.

Pon apenas una gota de cola vinílica en la base de cada pájaro, adhiérelos a las bases y deja secar. Debes pintar los pájaros una vez estén fijos a las bases pues de otra forma, al ser tan pequeños, el trabajo será muy engorroso.

Una vez seca la cola diluye en un recipiente un poco de esmalte blanco con aguarrás. Dales una mano a los pajaritos con un pincel fino, cuidando que no penetre la pintura en los ojos, que no manche el pico ni la base de madera.

Deja secar 30 minutos y da una segunda mano. En este momento puedes agregarle al blanco unas gotas de color para lograr un tono pastel.

Prepara un color naranja y pinta con una pequeña pincelada los picos de los pájaros.

Deja secar 4 horas, pincela una pequeña cantidad de cola vinílica en la base del espiral y adhiére el musgo seco.

Sólo resta preparar unas pequeñas tarjetas de agradecimiento para colocar en cada uno de los espirales. Una buena idea es presentar el regalo en una pequeña bolsita de papel reciclado.
Espero que te haya gustado y te hayas divertido con este trabajo.

¡Hasta la próxima!

Los espero en la próxima edición de Arte en casa con Shimi.