Las gardenias son de las plantas más hermosas para decorar jardínes; su perfume alegra cualquier sitio por más pequeño que este sea. Por eso si queremos un jardín realmente hermoso es muy recomendable plantar gardenias, ya sea en macetas o directamente en el suelo. Y para que esto sea posible, es necesario tener en cuenta el correcto cuidado de las gardenias.
Consejos para el cuidado de las gardenias


Condiciones ideales para las gardenias
Algo muy particular de las gardenias es que su suelo debe tener un PH muy especial ya que de lo contrario no se darán bien o podrían morirse. El PH adecuado para las gardenias esta comprendido entre 4.5 y 5,5, así no esta demasiado alcalina.
No menos importante, es la temperatura para el mejor cuidado de esta planta, que debe estar entre los 16 y 23°C. Prefieren un clima un poco más cálido por las mañanas que por las noches. Es muy importante para su floración que estén entre 20 y 23°C durante el día y de 15 a 17°C por las noches, de lo contrario difícilmente darán flores o estas serán esporádicas.
Ya sea en maceta o en suelo, debe contar con cierta corriente de aire, no demasiada solo lo suficiente para que no crezcan hongos por la humedad, también hay que evitar que la planta esté en una zona lodosa o con mal drenaje pues se pudriría.
Para evitar eso podemos poner turba antes de sembrarlas, es importante que el espacio para plantar las gardenias sea más grande que la bola de raíces, también es importante fertilizarla cada dos semanas desde que inicia la primavera hasta que finaliza el otoño. El mejor abono es uno un poco ácido y que sea liquido para poder ponerlo mientras las regamos y evitar que se maltraten las raíces.
Riego
Otra cosa que debemos tener en mente para que nuestras gardenias estén saludables y crezcan bien es tener cuidado al regarlas. A las gardenias les gusta mucho el agua y cierto grado de humedad, pero suelen ponerse amarillas, pudrirse o llenarse de hongos si están empapadas o no están bien drenadas.
Para saber si están en un grado de humedad optimo la tierra estará humedad sin estar empapada o muy mojada. Una cualidad de las gardenias es que requieren de menos agua en invierno.
Podemos evitar los encharcamientos o el exceso de humedad poniéndole turba o trozos de corteza alrededor del fondo antes de sembrarla, o escavan un poco y ponerle alrededor siempre respetando el tronco. Esto absorberá el exceso de agua y ayudará a filtrar mejor la tierra.
Un último pero no menos importante consejo es podar las plantas cuando las gardenias no esté floreando. Con estos sencillos consejos para el cuidado de las gardenias, nuestros jardines se verán muy hermosos y darán muchas y muy aromáticas flores, ideales para decorar la casa, además.








