Lifestyle

Bañar a tu gato (sin morir en el intento) es posible y su pelaje te lo va a agradecer

Dun dun dun…

PUBLICIDAD

Llegó ese momento, donde tienes que enfrentar la realidad; tu gatito consentido necesita un baño. La mayoría de veces un poco de agua hace el trabajo, pero después de que tuvo una pelea con la bolsa de la basura, y resultó ganadora, hay que sacar el jabón y la toalla.

Si es la primera vez que bañas a tu gato o no has tenido buenas experiencias, seguro quieres salir corriendo, pero con un poco de paciencia puedes convertir este momento en algo agradable para los dos. Aquí te dejamos una guía sencilla y práctica que puedes aplicar la próxima vez que tu gatito necesite refrescar su aspecto.

Antes del baño

Juega con tu gato

La clave está en buscar el tiempo perfecto para bañar a tu gato, por lo que una sesión de juego lo pondrá de mejor humor, estará más tranquilo y será menos probable que se saque las “garritas de fuego” para hacerte saber que no quiere un baño.

Junta los suministros

Es básico que lleves contigo TODO lo que puedas necesitar durante el baño… no quieres saber qué puede pasar si lo dejas solo y mojado. Así que antes de abrir la llave del agua, asegúrate que tienes a la mano:

  • Shampoo para gatos (que no irrite sus ojos). Haz un mezcla para diluirlo con una parte de shampoo por 3 partes de agua.
  • Recipiente para mojarlo poco a poco o en su defecto una regadera portátil
  • Toalla grande
  • Bolas de algodón para sus orejas
  • Toalla pequeña para su cara

Corta sus uñas

Si eres de las dueñas que está acostumbrada a cortar las uñas de su gato, entonces te recomendamos que lo hagas antes de empezar el baño, de esta manera si llegan a existir rasguños, no serán tan molestos.

PUBLICIDAD

Cepillo, cepillo

Para evitar pasar horas bañando a tu gato, puedes adelantar un poco del trabajo con la ayuda de un cepillo para su pelaje. Al pasarlo por el pelo de tu gato te desharás de los nudos y todo el pelo que está por caerse. Este es un buen momento para poner un poco de algodón en sus orejas, un paso importante para evitar que les entre agua.

Prepara el lugar para el baño

Te recomendamos buscar un lavabo o fregadero donde quepa tu gatito, ya que es más sencillo controlar el flujo del agua, así como los movimientos de tu mascota. Llena el lugar que elegiste con agua tibia. Te recomendamos que el nivel del agua le llegue hasta las patas y no olvides probar la temperatura antes de meter a tu gato.

Durante el baño

Moja sin exagerar

Con ayuda de la regadera portátil o el recipiente, comienza a mojar a tu gato, asegurandote no echar agua directamente sobre sus orejas, nariz y ojos.

Momento del jabón

Comienza a masajear el pelo de tu gato utilizando la mezcla de shampoo y agua. Empieza por la cabeza y baja hasta la cola con movimientos en la misma dirección del crecimiento de su pelo. Recuerda evitar la cara, las orejas y los ojos.

Enjuaga

Quita el jabón utilizando más agua tibia, acariciando el pelo para eliminar cualquier residuo de shampoo. Es importante que te asegures que se enjuagó todo el producto ya que si queda algo puede irritar su piel, además de que la tierra se pegaría con mayor facilidad a su pelo.

Carita limpia

Para limpiar su rostro te recomendamos utilizar una toalla pequeña, facial, que esté ligeramente húmeda. Pásala por su cara, pero ten cuidado de no presionar cerca de los ojos y las orejas.

PUBLICIDAD

Después del baño

Secado especial

Llegamos a la parte final del baño. Toma la toalla grande y seca a tu gato en un lugar donde no haya corrientes de aire. Si a tu gato no le molesta el ruido, puedes utilizar una secadora en su nivel más bajo de calor.

Un regalo inesperado

¿Gatito limpio? Sí señor y ahora para terminar esta sesión de belleza, puedes darle su snack favorito y decirle lo bien que se portó. Con este final tu gato dejará de ver la hora del baño como el fin del mundo.

Pelaje perfecto hasta el próximo baño

Ahora que ya quitaste la suciedad del pelo y piel de tu gato, es importante que sigas cuidándolo hasta el próximo baño. La forma más sencilla, pero también la más importante, es con su alimentación.

Cada comida puede proporcionarle la protección que necesita para estar saludable y tener un pelaje bello. Te recomendamos buscar alimento especializado para su etapa y estilo de vida. Asegúrate que cuenta con las vitaminas y minerales que su cuerpo necesita, como la vitamina A (visión) o el Zinc (piel y pelo sano). No olvides que para un pelaje suave y saludable, tu gatito necesita ácidos grasos como el Omega 3 y 6, así que revisa los ingredientes de su alimento para asegurarte de que están incluídos.

El baño de tu gato no tiene por qué ser una tortura, pero es importante que lo comiences con una actitud positiva y sobre todo que te mentalices a ser paciente.

Sigue leyendo: Tu gatito podría tener problemas de peso y esta guía rápida te ayudará a descubrirlo

>>>> Conoce 3 trucos básicos que te ayudarán a disminuir las bolas de pelo de tu gato