Los fanáticos siempre tendrán una opinión al respecto, pero eso no cambia el hecho de que el éxito y la popularidad NO son la misma cosa. Si bien es verdad que una franquicia popular tiene una rentabilidad nada despreciable, cuando se dan casos de franquicias con varias décadas encima, como por ejemplo Star Wars, James Bond, Godzilla o Pink Panther, se tiene que considerar que lo que causó furor en sus comienzos no siempre será exitoso en la actualidad. Y cualquiera que haya visto completas las mencionadas franquicias, tiene que admitir que algunas cosas no envejecieron del todo bien.
El MCU es la franquicia de cine más exitosa de la historia: 5 razones objetivas (e indiscutibles)

Ya con diez años desde su aparición, el MCU, actualmente es la «nueva franquicia» más reconocida y exitosa del planeta; pero hay varios factores más allá del punto de vista de quien escribe que sostienen esta afirmación.
A continuación, presentaremos 5 razones objetivas por las que el MCU es la franquicia más exitosa de la historia del cine.
1. Se atrevió a presentar personajes no tan populares

Kevin Feige, el presidente de Marvel Studios desde 2007, notó que la «competencia» (Warner y DC) siempre apostaban a lo seguro con producciones de Batman. Como Marvel no tenía los derechos de Spider-Man o X-Men, decidió incursionar en personajes que –en esa época– no tenían demasiada popularidad y solo eran conocidos por sus series animadas ya que la venta de sus cómics estaba por los suelos (Iron Man, Hulk, Captain America y Thor).
El éxito de lo que se empezó a llamar la Fase 1 del MCU, se apalancaba en que sus personajes coexistían en un mismo universo al igual que como ocurría en los cómics. Esto permitió explorar personajes todavía más desconocidos para los millenial; y eso abrió un nuevo abanico de posibilidades, donde las expectativas del público no eran tan altas ya que los personajes no eran tan populares.
2. Cada parte de la franquicia tiene un género y carácter propio

Si hablamos de franquicias como Star Wars, James Bond o Godzilla, las distintas obras que las componen más o menos siempre se mantienen en la misma línea argumental: una ópera espacial, una película de espías y una película de monstruos (respectivamente). Pero en el caso del MCU es diferente. Si bien es cierto que todas las obras involucran superhéroes, se dan casos como los de las películas de Captain America (película bélica y de espionaje); Ant-Man (una heist film, o película de robo); Thor (una aventura de fantasía) o Guardians of the Galaxy (una ópera espacial).
En el caso de las obras televisivas, los géneros se inclinan más al drama con series como Daredevil y Runaways; o la intriga con Agents of S.H.I.E.L.D., pero aun así, todos los personajes pueden funcionar y hacer referencia uno de otro, a pesar de que no se los coloque en una misma obra.
3. El fracaso de alguna de sus obras no determina el de la franquicia

El MCU no es solo la suma de todas las partes que la componen, la productora no se enfoca en hacer una franquicia exitosa, sino en hacer películas y series exitosas. A veces las cosas no salen como uno esperaba, pero como hay películas y programas que son éxitos de crítica, el espectador promedio sabe que la siguiente obra en aparecer puede resarcir cualquier error.
Esto ocurre de la misma manera en los cómics; por ejemplo, en la misma época en que la colección de Hulk optó por darle raciocinio al gigante esmeralda (Hulk Profesor), Spider-Man apareció vistiendo un traje negro del espacio (el simbionte). Ambas colecciones tuvieron diferentes destinos, pero eso no afectoó al evento que cruzo a ambos personajes. Este mismo efecto sucede en el MCU, si una película no te gustó, simplemente miras otra de un género más acorde a tus gustos.
4. No es necesario haber visto todas las obras para entender

Cuando se lee un número de una colección de cómic Marvel al azar, se puede ver que estos incluyen detalles propios al situarse antes o después de un evento importante; es por eso que los editores suelen hacer resúmenes de lo sucedido anteriormente en caso de que no se hayan leído los números anteriores.
En el MCU sucede algo parecido, como en la trilogía de Thor: la primera fue fresca y claramente más apuntada a un público infantil, así que muchos la consideraron como pasajera. La segunda fue un fracaso y la tercera fue un éxito. Si se lo analiza, no ver Thor: The Dark World (2013) realmente no afecta en nada a la trama de Thor: Ragnarok (2017), ya que en los primeros minutos es el propio Thor quien actualiza al espectador sobre su situación y lo que le pasó en obras anteriores. Lo mismo sucede con varias películas y series.
5. Cambia y se renueva con cada Fase

Este es posiblemente el factor más importante que hace al MCU un éxito histórico; ya que la franquicia nos demostró que, aun después de 10 años, todavía puede sorprender al espectador. Con cada fase concretada, el universo se ve expandido con la presencia de nuevos personajes, lugares y hechos en su propia mitologia.
Esto no es solamente una medida para «alargar» el éxito, sino también para plantear situaciones como las que ocurrieron en Avengers: Infinity War (2018), donde muchos héroes y villanos murieron en el final. Son pocas las películas de superhéroes que se atreven a eso, menos aun las que emplean personajes que todavía tienen proyectos futuros por delante en la franquicia. Con la finalización de varios contratos, se prevé que varios héroes dejen el MCU, pero eso no significa necesariamente el fin, ya que se enfocaría en la nueva generación.
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