Los tatuajes en las personas jóvenes, como en gente de cualquier otra edad, pueden hablar de su primer amor, de sus gustos musicales o su pertenencia dentro de un grupo social. Lo que sucede es que cuando somos adolescentes nuestros gustos varían, estamos en la epítome del desarrollo de nuestra personalidad y gustos, por lo tanto, quizás en 20 años no nos guste tanto esa banda que nos encantaba a los 15 años.
Por qué los adolescentes no deberían tatuarse

Los gustos personales cambian con el tiempo, y en los adolescentes es como un tornado que cambia con los minutos que pasan. Y es que todos los que se han hecho tatuajes (me incluyo) se arrepienten de al menos uno que ya no les gusta, que fueron hechos con rapidez, por un capricho y que ahora les parece desagradable.
Otra cosa, aunque no quiera generalizar, hay muchos adolescentes que no logran informarse acerca de los riesgos de los tatuajes, y de las opciones para remover, sus costos, lo difícil o doloroso que es tampoco.
Al menos la mitad de los adolescentes que se han hecho un tatuaje saben las dificultades y los riesgos de que ese sea removido, así que no ven que en un futuro podría ser más bien un problema. Y además, la idea es que tengamos un diseño que no nos de ganas de arrepentirnos, sino tenerlo para siempre.
Durante este periodo no se suele pensar en las consecuencias y los tatuajes representan muchas si no se hacen de manera correcta. Hay muchas cosas que considerar con mucha responsabilidad. Ahora, la mayoría de las tiendas de tatuajes están activando un método para evitar este tipo de problemas y solo pueden tatuarse personas mayores de 18 o 21 años, dependiendo de cual sea la edad de adulto en cada país. Algunos dicen que si sus representantes legales se lo permiten, entonces sí pueden tatuarse, pero otros ni siquiera eso.
Recuerdo que mi primer tatuaje fue a los 18 años, el mismo día que los cumplí. Me lo regalaron de cumpleaños y sin embargo ese no me arrepiento de tenerlo. No importa la edad realmente, sino la información que se tenga y ser proactivo para investigar.




