5 mecánicas y diseños de misión que se hacen odiar en los videojuegos

Una vez que hemos jugado decenas de títulos diferentes, comenzamos a notar que, en gran medida, las mecánicas y diseños de nivel son (salvo contadas excepciones) siempre los mismos, con algunas variaciones o hibridaciones que, sumados al contexto y el género del juego, dan la sensación de diferencia.

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En parte, es eso lo que hace que los jugadores experimentados tengan cierta facilidad para pasar de un juego a otro, o que las mecánicas intuitivas acerquen a los nuevos jugadores. Aunque por otro lado, es precisamente esa repetición la que nos hace aburrirnos de ciertos niveles, y odiar ese momento en que nos damos cuenta de que tenemos que enfrentarnos nuevamente a ellos.

¿Quieres conocer cuáles son esos niveles que ya comienzan a aburrir? Aquí te los mostramos...

#5 Las batallas imposibles

Y ahí estás... dispuesto a enfrentarte a un enemigo nuevo contra el que, a pesar de su apariencia poderosa, contamos con la confianza necesaria para creer que podemos ganar. Hasta que vemos sus puntos de vida, el daño que ocasionan sus golpes o el irrisorio daño que les ocasionamos con los nuestros.

Claro, luego nos damos cuenta de que tras la humillante derrota aparece una escena de video, donde descubrimos que nuestra derrota estaba programada. Y lejos de compensar la vergüenza, nos deja la idea de que todo este tiempo el juego se solo se burlaba de nosotros.

#4 Misiones de escolta

Nuestro personaje puede valerse por sí mismo, incluso frente a mortales enemigos y escenarios sumamente peligrosos. Y es por eso que odiamos tanto ese momento en que alguien se une a nosotros, y por uno u otro motivo debemos mantenerlo con vida.

Esto es algo que sería totalmente lógico en condiciones normales. Pero como sabemos, nunca es el caso, ya que generalmente ese personaje comete cada error posible, camina el triple de lento que nosotros, y nos frustra cada vez más como jugadores.

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#3 Misiones contrareloj

Casi al mismo nivel que las misiones de escolta aparecen esos niveles que nos obligan a realizar acciones o desplazarnos a determinado lugar en un mínimo de tiempo. Algo totalmente normal en videojuegos de carreras o con checkpoints, pero totalmente atípico en juegos de aventura.

Y es que nunca falta la bomba a punto de explotar, el edificio que se derrumba, o lo que sea que se inventen para ponernos de los nervios, mientras vemos cómo el reloj en pantalla se acerca lentamente a su destino.

#2 Cuando el azar lo es todo

Lo único rescatable de todos los casos anteriores es que, en definitiva, dependen de nuestra propia habilidad al jugar y la práctica podría finalmente darnos la ventaja. Cosa que en niveles que dependen de la suerte se transforma en una tortura.

No importa qué tan bien equipado estés, qué tanta experiencia tengas o cuántas armas o vidas hayas recolectado a lo largo del juego. En ocasiones, el resultado de una misión depende del azar y, como sabemos, no siempre está de nuestro lado. ¿Quién ve eso como entretenido?

#1 Las misiones de entrega en los MMORPG

Pero claro, no hay nada más agobiante que las misiones repetitivas en los juegos online, que básicamente se resumen en 5 pasos:

Llegas a un lugar, hablas con un personaje que te da la misión; consigues lo que pide (recolectar ítems o matar determinada cantidad de enemigos); vuelves con tal personaje a entregar lo que necesita; hablas para que te dé tu recompensa y obtienes una nueva misión; viajas al nuevo lugar para repetir el proceso con otro personaje... ¡Diversión de la buena!

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¿Tú también odias este tipo de misiones? ¿Qué otros niveles crees que merecen el odio generalizado? Seguro también te has enfrentado a estas situaciones.