Un tatuaje puede ser un souvenir diferente para recordar nuestro paso por un nuevo destino. Si a ello le sumamos los precios más reducidos de los tatuajes en países como Japón o Tailandia, las técnicas de diseño que priman en otros continentes, o la ocasión de un viaje como excusa para tatuarnos por primera vez, regresar con un diseño en nuestra piel suena muy atractivo. Sin embargo, nunca estará de más tener en cuenta estos 5 consejos si estás pensando tatuarte en el extranjero.
5 consejos si estás pensando tatuarte en el extranjero


Cuándo tatuarse
Si vas a realizar un viaje por las islas tailandesas para penetrar poco después hacia el interior, plantea tatuarte en la última fase del viaje, pues hacerlo durante los primeros días de tu travesía y exponerte al sol o el agua de la playa puede no ser la mejor idea. Aparta tu lado más impulsivo y piensa que no solo se trata de un tatuaje, sino que esto requiere de unas precauciones y cuidados posteriores oportunos.
¡Ah! Y por supuesto, no olvides cuáles son los peores lugares del cuerpo donde tatuarte.

Investiga por Internet
Si eres de los que prefiere arriesgar en algún salón de tatuajes clandestino (y barato) de una ciudad lejana, allá tú. Si, en tu caso, quieres hacer bien las cosas, te recomendamos chequear por Internet los principales salones de tatuaje y artistas locales, comprobar si tienen página web y, especialmente, si poseen buenas opiniones y referencias de los usuarios.

Boca a boca
En ciudades como Delhi, Bangkok o Rio de Janeiro, el boca a boca puede ser incluso más efectivo que en los países de Occidente, por lo que atreverte a preguntar a un vendedor o artista por referencias de ese tatuador, o a la hora de buscar uno nuevo, será una buena opción. Pregunta en lugares como hoteles o tiendas, pues si lo haces a cualquier transeúnte despistado, posiblemente este trate de ayudarte en cualquier aspecto excepto en el de conseguirle empleo a un vecino.

Comprueba el equipo
En continentes como Asia, los equipos de esterilización suelen ser caros, por los que los descuidos sanitarios están a la orden del día en los estudios de tatuadores. Aprovecha tu estancia en el barrio para curiosear la tienda y preguntar al tatuador si todo está en orden, si utilizan agujas frescas y productos de calidad. De no hacerlo podrías lamentarlo.

Confía en tu intuición
Si por algún motivo el tatuador o staff del estudio no te inspira confianza, rechaza la idea de tatuarte con ellos. Recuerda que un tatuaje es un producto que lucirás en tu piel para siempre y su ejecución es clave si no quieres lamentarte poco después. Investiga nuevos estudios, pregunta y si ninguno te convence, prueba a tatuarte al volver a casa.
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Estos 5 consejos si estás pensando tatuarte en el extranjero obedecen a las mismas normas de Occidente: precaución, información, higiene y mucho cuidado posterior. En concreto, este último aspecto dependerá de ti, de modo que evita nadar o exponerte demasiado al sol en ese país al que, seguramente, habrás viajado por sus muchos encantos turísticos o naturales.




