Rupturas y secretos en Hawaii Five-0 [Crítica 3x24, final de temporada]

Excelente final de temporada para Hawaii Five-0, conjugando acción y emociones, desvelando algunos secretos y guardándonos otros para la temporada que viene. Sin embargo, lograron darle un final feliz a casi todos los integrantes, excepto para Steve que todavía tiene que lidiar con Wo Fat.

En Aloha, Malama Pono (Farewell and Take Care) -Adiós y Cuídate- vemos a Kono ( Grace Park) escapar de la policía con Adam ( Ian Anthony Dale) a su lado, incondicional. Mientras que Five-0 debe investigar un avión que aterrizó con todos sus tripulantes muertos, a excepción del malo que transportaban: un terrorista en potencia. Mientras que Steve ( Alex O’Loughlin) finalmente confronta a su madre.

Asuntos de Seguridad Nacional

Si bien ya sonaba raro que un avión privado aterrizara en una pista cualquiera, sino que encima no estaba registrado en ningún lado, ni tampcoo quienes iban en él, lo cual hizo sonar una alarma en todo el equipo de Five-0. Al investigar encontraron que se trataba del traslado de un fugitivo de alta seguridad que tenía información sobre un inminente ataque terrorista a EEUU.

Rafael Salgado, sí el fugitivo pertenecía a una organización terrorista latinoamericana, lo cual llevó a que me formulara una pregunta: ¿se le acabaron los malos mediterráneos y ahora están detrás de nosotros? Por supuesto que nada tiene que ver, pero no dejo de imaginármelo. En fin, entre la búsqueda del malo, que encima había secuestrado a su propio hijo, los muchachos estaban bastante enojados y cuando finalmente lo encuentran, no era él quien lo tenía.

Básicamente, después de una gran escena de acción vemos cómo Steve, Danno ( Scott Caan) y Chin ( Daniel Dae Kim) logran rescatar al niño secuestrado. Inclusive, Rafael al borde de la muerte cumple con su parte del trato al decirles en qué parte de la ciudad de San Francisco se encontraba la célula terrorista dispuesta atacar. Un día más en la oficina, tratando asuntos de seguridad nacional y atrapando a los malos.

Buscando la Inocencia y la Felicidad

Entonces Kono debe buscar las pruebas de su inocencia y Adam decide ayudarla, a pesar de lo que han pasado juntos. Lo mejor es que se dicen la verdad, eso que venían ocultándose desde hace varios capítulos atrás. Sin embargo, se dan cuenta que siempre fue Michael quien había robado su arma y vuelto a poner en el lugar.

Al encontrar lo que exoneraría a Kono y entregársela a Fong para que le realice las pruebas, quedando libre de culpa y cargo. El problema es que primero a Charlie lo hieren y está en condición crítica; el segundo es que Adam mata a su hermano defendiendo a su amor. Si, pobrecito por un lado, pero por el otro se lo tenía merecido. La cuestión es que ahora debe esconderse hasta que atrapen a los malos para poder estar tranquilo, aunque no se va solo. Kono se va con él.

En el camino, Steve debe acudir a Wo Fat ( Mark Dacascos) para dar con el fugitivo encontrándose con algo peor: que su madre había ido a visitarlo y cuando le está por decir quién es, los interrumpen. Continuaría de esa forma, ya que Doris ( Christine Lahti) ayuda a Adam y a Kono a esconderse por un tiempo, dejando inconclusa la conversación. Excepto que Wo Fat le tiende una trampa para que lo ayude a escapar. Aparte de todo, me encantó el lugar donde lo tienen preso y que haya quedado como dos caras, creo que es parte de lo que viene en la cuarta temporada.

Final feliz para Danno y Chin, donde el primero retorna con Gabi y el segundo invita a salir a la enfermera de la cárcel. Ahora Steve, se las verá en bastantes problemas cuando la serie regrese y con muchas cosas todavía para resolver. Tengo la leve impresión de que Wo Fat es un medio hermano, o alguna teoría loca por el estilo. Pese a todo, fue un gran episodio resolviendo varias dudas y dejando otras para que analicemos en estos meses que nos separan de lo que sigue. Al menos no termine con el corazón en la boca como en las anteriores.

Puntuación: 9/10.