El caso Weinstein provocó una gran conmoción dentro Hollywood y en el mundo entero. Por primera vez en la historia se conoce un poco de la nefasta verdad oculta en el mundo del espectáculo, lugar donde el acoso sexual por parte de aquellos que ostentan «mayor poder» es una macabra realidad.
Quentin Tarantino habló del caso Weinstein y se arrepiente de su prolongado silencio


Desde que salieron a la luz las acusaciones, muchos han estado esperando oír las declaraciones de Quentin Tarantino y por más que a simple vista parezcan intrascendentes, en realidad son todo lo contrario. Harvey Weinstein fue el responsable de impulsar la carrera como director de Tarantino, al llevar adelante films tan icónicos como Reservoir Dogs o Pulp Fiction, por lo que su opinión es realmente trascendente.
Claro, en una situación tan delicada nadie quiere ensuciarse las manos y las declaraciones de Tarantino a The New York Times tratan de ir por la senda de lo «políticamente correcto» tratando de dejar claro su arrepentimiento por no haber dicho nada antes:
«Sabía lo suficiente como para hacer más de lo que hice. Habían más que los rumores normales, los chismes normales. No era algo de segunda mano. Yo sabía algunas de esas cosas. Desearía haber tomado la responsabilidad de lo que escuché. Si hubiera hecho lo que tenía que hacer, no habría trabajado con él».

Aunque Tarantino admite que debería haber hecho algo cuando pudo, sus declaraciones sin dudas traerán consecuencias a su carrera, pero también a las de todos los allegados de Weinstein a quienes Tarantino no duda en tildar como conocedores de la situación:
«Lo que yo hice fue marginalizar los incidentes. Todo lo que diga ahora va a sonar como una excusa barata. Todas las personas cercanas a Harvey oyeron al menos uno de los incidentes. Es imposible que no lo hayan hecho».
A pesar de su inexplicable silencio, Tarantino sufrió de cerca los abusos de Weinstein, su exnovia Mira Sorvino había sido acosada por el productor en 1995:
«En aquel entonces estaba conmocionado. No podía creer que él lo hiciera tan abiertamente. Era como: ¿En serio? ¿realmente? Pero en ese momento pensé que era algo particular con Mira. Creí que Harvey estaba enamorado de ella en una manera “Svengali” [nombre de un personaje de George du Maurier, y que es aplicada para referirse a un bully manipulador]. Pensé que había cruzado la línea por estar enamorado de ella».
Las palabras de Tarantino son desafortunadas y lo sepultan en un mar de dudas e incongruencias que sin dudas tendrán consecuencias en su carrera y vida personal. Su prolongado silencio es incomprensible desde todo punto de vista.
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